La tragedia desatada ayer a partir de un incendio en una vivienda de Ciudad, donde una menor de 12 años perdió la vida a raíz de quemaduras en todo su cuerpo, mientras su madre permanece internada en grave estado en el hospital Lagomaggiore, no deja de generar conmoción.
Si bien las causas del siniestro aún se investigan, no se descarta que el foco se originara a partir de un desperfecto eléctrico o alguna una llama utilizada para calefaccionar el hogar donde habitaban Carina Cardello y su hija Camila.
“Una madre ejemplar, luchadora, guerrera. Y una niña hermosa, su única hija, a la que criaba sola porque estaba separada”, señaló a Los Andes Stella Maris Velázquez, amiga de Carina y quien se enteró de la trágica noticia mientras estaba en su trabajo.
Stella y Carina se habían hecho amigas algunos años atrás, cuando la primera de ellas se mudó a un departamento situado a escasos metros de la segunda, sobre calle Ingenieros, en el barrio Soberanía Nacional, detrás del penal San Felipe. Se hicieron inseparables. Luego Stella se alejó de Mendoza por temas laborales pero todos los días, rigurosamente, se mensajeaban por WhatsApp para desearse buenos días.
“No puedo creerlo, no puedo creerlo”, repetía Stella, mientras repasaba la fotografía de Camila y su inmensa sonrisa, sus poses y su peinado impecable, sujetado con una vincha.
Fueron los propios vecinos quienes alertaron sobre un incendio y de inmediato llamaron a la Policía y los bomberos, que llegaron en pocos minutos para sofocarlo y atender a las víctimas.
Después de apagar las llamas, los efectivos lograron sacar a la niña, aunque ya se encontraba sin vida. Su mamá, de 49 años, tuvo que ser trasladada por el Servicio Emergencias Coordinado al hospital Lagomaggiore a raíz de severas quemaduras que afectaron la mitad de su cuerpo. El horario de ingreso al sanatorio, según pudo saberse, fue alrededor de las 3.30 de la madrugada.
Mientras que ayer en horas de la mañana continuaban las tareas de enfriamiento y las pericias en el domicilio para determinar las causas del siniestro, el parte médico brindado desde el Lagomaggiore no fue alentador. El último informe del servicio de Terapia Intensiva de Quemados señala que la paciente se encuentra con respiración asistida, en mal estado general y con quemaduras de tipo A y B en el 50 por ciento de su superficie corporal.
“Actualmente la paciente se encuentra en falla respiratoria por inhalación de sustancias tóxicas, con daño de parénquima pulmonar, por lo que requiere asistencia respiratoria mecánica. Se encuentra en mal estado general y hemodinámicamente inestable con requerimiento de vasopresores oligoanúrica.
Señala, además, que por presentar síndrome comparimental (un trastorno doloroso y peligroso a raíz de un sangrado interno) se realizó escarotomía del brazo izquierdo, es decir, un procedimiento quirúrgico que conlleva la realización de una incisión a través de una escara cutánea con la profundidad del nivel del tejido adiposo subcutáneo. “El pronóstico es malo”, reitera el informe en el final.
