Sin pausas avanza la investigación por el crimen de Nahuel Nicolás Acevedo (34), el hombre hallado sin vida en un camping de Blanco Encalada, Luján, en febrero pasado y cuyo caso tendría como móvil el robo de su casa. La víctima intentaba venderla para irse a vivir a su Buenos Aires natal pero los tres acusados lo habrían asesinado a golpes para quedarse con la vivienda. A los imputados les dictaron la prisión preventiva.
Ayer el juez Sebastián Sarmiento ordenó que Ernestino Funes y dos sobrinos, Felipe -de igual apellido que su tío- y Leandro Luján, sigan detenidos como presuntos coautores de un homicidio criminis causa, lo que significa que habrían matado a la víctima para ocultar otro hecho, en esta ocasión el apoderamiento ilegal de un bien.
El fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello en la audiencia de este miércoles enumeró las pruebas que los ponen como sospechosos y ante una pena única de prisión perpetua en un futuro juicio por jurados.
Para los pesquisas, los detenidos llegaron al domicilio de calle Corrientes 1.854, de Godoy Cruz, con intenciones de quedarse con el inmueble y sabiendo que su dueño lo tenía en venta. Por circunstancias que se investigan hubo un altercado que terminó con agresiones y el posterior asesinato.
Un amigo de Acevedo denunció su desaparición luego de perder contacto con él, y en su declaración sostuvo que el fallecido le había contado con quiénes había entablado las negociaciones y que los mismos no le generaban confianza. Con estos datos, la Justicia habilitó un allanamiento en la casa en cuestión, donde hallaron todo revuelto y manchas de sangre.
La detención de Ernestino Funes fue rápida porque el denunciante aportó su identidad y el detalle de que vivía en la misma cuadra, ya que era conocido porque habría trabajado con Acevedo. Este sospechoso se quebró y confesó todo: sus presuntos cómplices -luego arrestados- y dónde arrojaron el cadáver. Además, en su poder encontraron una mochila del muchacho atacado con documentación de la propiedad.
El miércoles 10 de febrero el amigo de Nahuel se había presentado en una comisaría para iniciar la averiguación paradero y el sábado siguiente se halló el cuerpo durante la madrugada en un camping.
Un día después, la Policía dio con una camioneta Peugeot Partner mientras se incendiaba en el Campo Papa, vehículo que pertenecía al hombre ultimado y que habrían utilizado para trasladar sus restos hasta Blanco Encalada.
