La Justicia dictó prisión preventiva para “Pablito Chorro”, un joven de 21 años que está acusado de haber terminado con la vida de un hombre de 58 que fue asesinado de un piedrazo, tras intentar detener una pelea entre un hombre y una mujer en Guaymallén.
Esta mañana, la jueza Claudia Tula, integrante del Tribunal Penal Colegiado 2, ordenó que Nicolás Domínguez Mercedi siga detenido, acusado de homicidio simple.
La solicitud de la medida fue realizada por el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello, quien lidera la investigación que se inició el 20 de julio pasado, tras la muerte de Osvaldo Ricardo Ramos (58).
Un hombre con antecedentes
Nicolás “Pablito Chorro” Domínguez fue detenido el 2 de octubre pasado luego de dos allanamientos realizados por efectivos de la División Homicidios en el barrio Santa Teresita de Las Heras.
Durante los procedimientos, el joven intentó huir por los techos de una de las viviendas allanadas, pero tras una persecución lograron detenerlo en un pasillo interno de la manzana F del barrio.
Según información del Ministerio de Seguridad, Domínguez tiene un historial delictivo significativo, que incluye amenazas agravadas, robo simple, lesiones leves, coacciones, hurto agravado, hurto simple y robo agravado.
El 20 de julio pasado, Osvaldo Ramos estaba junto a un amigo en Buena Nueva. Los hombres estaban a bordo de la camioneta Toyota Hilux de Ramos cuando vieron a una pareja discutiendo en calles Serú y Tirasso.
Ramos bajó del vehículo para ayudar a la mujer. Esto desató la furia de la pareja de la mujer, quien comenzó a arrojar piedras contra Ramos, contra la camioneta y después se dio a la fuga.
Por razones que se investigan, otras personas que se encontraban en el lugar comenzaron a golpear a Ramos. Frente a esto, el hombre volvió a la camioneta, pero los agresores comenzaron a arrojar objetos contra la camioneta.
Ramos volvió a bajar para confrontarlos, pero los ataques continuaron y terminó con una herida fatal en la cabeza. Momentos después, en calle Rópolo de barrio Las Viñas detuvieron a un sospechoso de 19 años que coincidía con la descripción que habían hecho los testigos, pero finalmente se determinó que nada tenía que ver con el crimen.