Un chivito y una gallina iban a ser sacrificados en un rito religioso en un templo umbanda, el cual funcionaba en una casa del barrio porteño de Almagro, Buenos Aires. Gracias al accionar de la Policía de la Ciudad fueron rescatados y trasladados a un santuario para animales.
El allanamiento en la vivienda la calle Mario Bravo al 400 ocurrió tras la denuncia de vecinos al Ministerio Público Fiscal y la intervención estuvo a cargo de la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), a cargo del Dr. Carlos Rolero Santurian, detalló TN.
Los denunciantes habían alertado a las autoridades que en la terraza del lugar se encontraba una cabra, expuesta al sol y a las altas temperaturas sin agua ni comida desde hace varios días atrás. Además, agregaron que el animal sería sacrificado en un rito religioso en el día de Navidad.
Al perecer y según el testimonio de los vecinos, al lugar continuamente llegaban diversos animales para ser utilizados en ceremonias de ese tipo, que serían propias de la religión umbanda.
Ante esta situación agentes de la Brigada de Investigaciones de la Comuna Vecinal 5 de la Policía de la Ciudad, con la colaboración del Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal de la Ciudad, constataron que el chivito se encontraba en una situación de vulnerabilidad en un ámbito que evidenciaba falta de cuidado, sin las condiciones de higiene mínimas necesarias y sin tener alimentos ni agua a su disposición. La gallina se encontraba en las mismas condiciones.
Así están los animales en el santuario
Los animales fueron inmediatamente revisados por un médico veterinario y se determinó que las condiciones del lugar no eran las aptas para su permanencia, por lo que el fiscal ratificó el secuestro de los mismos y su entrega a la ONG vegana Santuario Salvajes, ubicada en la localidad de Abasto, partido de La Plata.
En un video publicado en Facebook, una voluntaria del refugio que justo tenía una cabra tatuada en el brazo explicó que “actualmente rescata animales de granja” y que los animales iban a ser atendidos por un “veterinario, por las dudas, para que vea si tienen algo”.
“Cuando nos llegan animales rescatados antes o después de un rito no sabemos si no le pusieron nada adentro antes de (querer) sacrificarlo”, indicó.
También contó que “todos los animales que sean así, de un color pleno o de dos colores, suelen ser sacrificados, más que nada en estas fechas”. “Este se salvó”, celebró la joven.
“Anthony como lo nombramos y Nalu la gallina viajaron muy tranquilos. Ahora ya están a resguardo en el santuario y van a recibir tratamiento veterinario, además de cuidados y mucho amor”, escribieron en la publicación.
Imputados por el hecho
En el templo también había varias imágenes religiosas, como murales y figurinas de Jesús, dos motos y un pequeño espacio acondicionado que aparentemente servía como área de descanso para el chivo y la gallina.
Asimismo, se imputó a un hombre responsable del domicilio a cargo del animal por los delitos de omisión de recaudos de cuidado responsable de un animal a cargo y por infracción a la Ley 14.346 de Protección Animal.
Cabe resaltar que en el procedimiento participó además personal de la Dirección General de Control Ambiental (DGCONTA) del Gobierno de la Ciudad.