Ivana Mariela Módica (47), la mujer que es intensamente buscada en la provincia de Córdoba, conocía a Javier Galván (44), un instructor de vuelo que tiene más de 20 años de servicio en la Fuerza Aérea y ahora el principal sospechoso de su desaparición, desde hacía 10 años debido a que trabajaban juntos en dicha fuerza.
Hace tan solo un año, ambos iniciaron una relación de pareja que luego derivaría en denuncias por violencia de género en el mes de septiembre pasado: según lo detalla Clarín, la mujer advirtió por violencia física, psicológica y maltratos verbales. Debido a esto, la justicia ordenó una restricción perimetral para que no pudiera acercarse a su casa de la ciudad de Córdoba.
Sin embargo, el vínculo de pareja siguió y al poco tiempo Ivana decidió mudarse con Galván a 70 kilómetros de su domicilio y de su familia. Paralelamente, Ivana mantenía comunicación fluida y permanente con su hija, Nicole Módica (26) y que vive en Reconquista, y con su mamá; este dato es fundamental para entender que fueron ellas las que presionaron a su pareja para que hiciera la denuncia por su desaparición.
Sin embargo, nieta y abuela desconfían de las versiones del sospechoso debido a las denuncias previas: fue él quien orientó la búsqueda a una determinada zona, además de señalar que Ivana estaba durmiendo en la casa que compartían el sábado a la mañana.
Además este hombre manifestó que la intención de la mujer previo a su desaparición era ir a caminar por los senderos del cerro, antes de dedicarse a acomodar la casa para recibir a Nicole, su marido, y sus hijos, que llegarían de visita el sábado al mediodía.
Pero la familia desconfía de las palabras de Galván, debido a esto el sospechoso nunca dejó de tener custodia y desde este lunes quedó detenido por contradicciones en su testimonio. Ahora los rastrillajes están concentrados en los alrededores de la casa en la que vivía la pareja.
