Previo a que se trate el sobreseimiento de los rugbiers franceses acusados de abusar de una mendocina de 39 años, se tratará el apartamiento de la jueza Elenora Arenas, quien supervisa la causa contra los deportistas galos.
Se trata de una presentación que hizo Natacha Romano, la abogada de la presunta víctima, y que deberá resolver la jueza Carolina Colucci mañana a las 15.
La presentación realizada por la querellante es para que la jueza Arenas sea apartada, ya que la recusación presentada sostiene la magistrada habría preopinado y no podría garantizar la imparcialidad. En la audiencia de mañana Romano expondrá sobre la solicitud y ampliará los conceptos vertidos en la recusación.
Si la jueza Colucci decide apartar a su colega Arenas, se verá retrasada la audiencia de sobreseimiento que está programada para el lunes próximo a las 9.
En cambio, si sigue Arenas, será el último capítulo de caso y Oscar Jegou y Hugo Auradou quedarían totalmente desvinculados de la causa que aún los tiene imputados abuso sexual agravado por acceso carnal.
El 27 de agosto pasado, luego de que fueran autorizados a salir de país, los franceses tomaron un vuelo con destino a Paris. Es mismo día los abogados defensores -Rafael Cúneo Libarona, hermano del ministro de Justicia, Mariano Cúneo Libarona, y Germán Hnatow- presentaron un escrito ante el fiscal Darío Nora solicitando el sobreseimiento de los jóvenes imputados con la intención que queden totalmente desvinculados del caso. Esta medida, de no mediar novedades se completaría el lunes próximo.
Previo a primera audiencia de sobreseimiento hubo un cruce entre la denunciante y el abogado de los franceses: la mujer dio una entrevista radial y horas más tarde, el abogado de los dos rugbiers franceses, le contestó en la puerta de Polo Judicial.
La presunta víctima aseguró que “la Justicia no ha actuado correctamente” y pidió que los acusados queden presos.
Después, la mujer hizo hincapié en cómo fueron los sucesos aquella noche del sábado 6 de julio y la madrugada del domingo 7. “Yo no quise quedarme en la habitación. Me privaron de mi libertad.”, aseguró la denunciante. “Me mordieron. Me trataron como un pedazo de carne”, agregó.
Respecto al audio que ella le había enviado a su amiga en la tarde del domingo 7 y que más tarde se volvió viral, la víctima se justificó: “En el audio estaba bajo efectos del alcohol, de medicación psiquiátrica y analgésicos”, agregando que “Le agradezco a mi amiga porque me hizo abrir los ojos para denunciar”.
Horas más tarde Rafael Cúneo Libarona, brindó una entrevista y dijo: “la mejor amiga la que aporta los audios. A ver si me entienden: la mejor amiga es la que aporta los audios ¿por qué no los presentó esta chica, la denunciante?”, agregando que primero había dicho que había disfrutado del encuentro sexual y luego los denunció como presuntos violadores.