Policías de distintas provincias completaron hoy el tercer curso nacional de enduro dictado por efectivos de la Unidad Motorizada de Acción Rápida (UMAR), referentes en el país por su experiencia en el manejo de motos y tácticas policiales.
El cursado inició el 10 de octubre y finalizó este miércoles, con una carga horaria de 252 horas cátedra. En total, 12 policías cursantes pertenecientes a las provincias de Mendoza, Jujuy, Entre Ríos, Catamarca, Tucumán y Santa Cruz realizaron la especialización.
Los uniformados adquirieron técnicas de conducción en zonas agrestes y se desenvolvieron en terrenos como el piedemonte de Chacras de Coria, el dique Frías y la ruta 13. Realizaron arriesgados ascensos y descensos, frenados con una complejidad creciente en la aplicación de sus técnicas, para lograr una avanzada conducción de sus vehículos durante el desempeño de sus funciones.
Los “hombres de negro” de UMAR contaron con los aportes del personal de la Patrulla de Rescate de la Policía mendocina. Fueron instruidos en evaluación primaria de traumatizados en zonas de difícil acceso, dando las bases para verificar el estado de salud de una persona que pueda encontrarse lesionada en el campo y recabar datos importantes para aportar datos al Servicio de Emergencias Coordinado y lograr un trabajo más efectivo.
Con efectivos del Cuerpo de Aviación Policial los cursantes fueron capacitados respecto a cuándo se puede solicitar la aeronave en apoyo del personal de UMAR para realizar una evacuación, qué se debe tener en cuenta para, desde tierra, ayudar a encontrar una superficie óptima para el aterrizaje del helicóptero y el acercamiento.
Además el subcomisario Alejandro Alonso aportó sus conocimientos sobre cuerdas, distintos nudos, arnés de circunstancias, anclajes y armado de camillas, llevándolos a la práctica en el terreno. También los capacitó en la utilización de la brújula y las distintas formas naturales de poder guiarse en la montaña.
Los cursantes fueron instruidos en la utilización del GPS como método tecnológico para poder navegar en el terreno en la búsqueda y rescate de una persona extraviada y/o traumatizada en zona de difícil acceso para vehículos convencionales, logrando así arribar de manera más directa al lugar donde se encuentre la persona en emergencia o solicitar apoyo.