Este miércoles la Justicia de La Rioja revocó la sentencia contra el tatuador Patricio Pioli en la causa de “pornovenganza”, por la cual le habían otorgado prisión domiciliaria. Ahora será trasladado al penal provincial donde deberá cumplir la condena por los próximos cinco años.
Hace casi una semana atrás Pioli había sido sentenciado a cumplir condena en su casa, porque el fallo no estaba firme. Sin embargo, este miércoles y por pedido de los fiscales del caso, Luis González Aguirre y Andrea Cecilia Moreno, la Cámara Tercera en lo Criminal y Correccional de La Rioja cambió la sentencia y pidió el inmediato traslado del tatuador.
“Vamos a presentar un amparo para que se revierta esta situación y Pioli pueda beneficiarse nuevamente con la prisión domiciliaria”, explicó Matías Cucco, el abogado defensor del tatuador, según publicó el sitio riojano Tiempo Popular.
El fallo que se conoció el pasado jueves es inédito en la historia argentina, ya que es la primera vez que un acusado de difundir material sexual íntimo de una ex pareja, sin su consentimiento, haya sido sentenciado con prisión.
La justicia riojana decidió que el tatuador fuese condenado a cinco años de prisión por “coacción y lesiones leves calificadas” en contra de su expareja, Paula Sánchez Frega, que logró llevarlo a juicio luego de que él viralizara videos y fotos con contenido sexual, cuando se separaron.
Además de la sentencia que deberá cumplir en prisión, Pioli tendrá que pagar las costas del juicio. Sumado a que también deberá someterse a un “tratamiento psicológico permanente” durante su estadía en prisión.
El infierno de Paula
Pioli, de origen sanjuanino y conocido en La Rioja como “el tatuador” fue denunciado por Sánchez Frega por violencia de género y amenazas de difusión de material íntimo luego de finalizar su relación en 2016.
Sánchez Frega comentó una vez a Clarín sobre las fotografías y filmaciones sexuales que hacía con su expareja: “Con mi consentimiento, él grababa nuestras relaciones íntimas (...) A mí no me molestaba, confiaba en él y pensaba que no pasaría del círculo de sus amigos”.
Ahora, Sánchez Frega aseguró que los ataques de Pioli nunca cesaron y que tras el veredicto de la semana pasada, el ciberacoso hacia su persona se incrementó y la denigración no cesa.
“Empecé a recibir ciberataques después del veredicto. Volvieron a viralizar las fotos y los videos que habían aparecido en las redes en 2017 y ahora aseguran que hay un nuevo video en Telegram, que en realidad es otra parte del mismo video de aquel entonces que no se dio a conocer”, denunció Sánchez Frega.