En las últimas horas se viralizó un video que mostraba un supuesto “uso indebido de un móvil policial”. Un conductor se cruzó con una camioneta de la Policía de Mendoza que llevaba una heladera y otros muebles en la caja y filmó la secuencia. Creyó que se trataba de una mudanza y, por lo tanto, de un mal uso de los bienes del Estado.
“Cocina, heladera, un colchón ¿y eso quién lo paga?”, se preguntó el usuario que grabó el video y lo posteó en las redes sociales. Lo llamativo era que el móvil llevaba las balizas policiales encendidas.
La reacción de los usuarios fue casi inmediata ya que, al igual que autor del video, muchos creyeron que se trataba de un “policía fletero”.
La verdadera historia detrás del video
Tras el revuelo generado por el video viral, desde el Ministerio de Seguridad y Justicia emitieron un comunicado sobre el hecho. Según explicaron, la movilidad 3758 que circulaba por Costanera con varios electrodomésticos en la caja, formaba parte de un megaoperativo.
“Formaba parte de un despliegue de seis allanamientos realizados por la Policía de Mendoza. La investigación la llevaba adelante la División Robos y Hurtos en el marco de una causa por un robo agravado”, afirmaron en el texto.
La camioneta estaba en pleno proceso de traslado de bienes incautados durante un megaoperativo que se realizó en Guaymallén y en Lavalle, en el marco de una investigación por un robo agravado.
Durante el procedimiento, la Policía secuestró diversos elementos, entre ellos, una heladera y una cocina, los cuales fueron trasladados en el móvil policial mencionado.
Estos bienes, junto con otros como armas de fuego, herramientas y dispositivos electrónicos, fueron secuestrados bajo las directivas de la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos Agravados y Sustracción de Automotores.
En total, se incautaron cuatro teléfonos celulares, tres armas en fuego (una pistola, una escopeta y un rifle), varias municiones y cartuchos, electrodomésticos, mochilas y tapas de llantas, según se informó oficialmente.
Un denunciante imprudente
En el mismo texto, las autoridades remarcaron que la persona que realmente estaba en falta fue el autor del video. Ya que la imprudencia del conductor, al filmar y difundir el video, no sólo comprometió su propia seguridad y la de otros conductores, sino que también contribuyó a la propagación de un malentendido.
