Melani Juárez tenía 21 años y era de Rosario. Desde el domingo sus amigos habían intentado ubicarla pero no contestaba su teléfono. Sin embargo, lo que más los preocupó fue que dejó de subir contenido a sus redes sociales. Este dato les llamó la atención ya que era uno de sus principales ingresos de la joven, la cual se dedicaba a la venta de material erótico por distintas plataformas como Onlyfans.
Es por este motivo que decidieron llamar a la hermana de Melani y luego dirigirse a la habitación que alquilaba en una pensión de la ciudad santafesina.
Cuando llegaron, notaron que la puerta estaba cerrada por lo que tuvieron que usar la llave de la hermana para ingresar. Una vez en el interior se encontraron con una escena terrorífica: El cuerpo de la joven estaba en el piso con, al menos, 14 puñaladas, víctima de un bestial femicidio, detalló Infobae.
Según el informe que elaboró Policía Científica horas después, el cuerpo de la Juárez estaba en el suelo con la cabeza apoyada sobre el colchón de la cama. Además de la puerta cerrada con llave notaron que la única ventana de la pieza estaba en perfecto estado. Es decir, nadie forzó ninguna abertura. Otro dato relevante es que la habitación estaba con todas las luces apagadas pero con la televisión encendida con el volumen al máximo.
En la habitación no había nada revuelto y sólo faltaba una cosa: el celular de la víctima.
“Melani vivía hace aproximadamente un año en esa pensión ubicada en la calle 9 de julio al 500 en el Barrio Martín. Antes vivía con su madre en la zona norte de la ciudad. Ella era profesora de danza y grababa videoclips. También trabajaba como empleada en un local de celulares pero perdió ese trabajo por la pandemia. Por eso se dedicaba a la venta de contenido erótico por distintas redes como OnlyFans”, explica un investigador.
Según el cálculo del médico que revisó el cadáver en el lugar, el asesinato de Melani se habría producido más de 36 horas antes del hallazgo, es decir en la madrugada del domingo. Algunos vecinos declararon ante la Justicia que hacía días que sentían olor a podrido.
“Por el momento ningún vecino aportó datos concretos. Solo hablaron del mal olor. Es curioso que nadie haya escuchado nada porque estamos hablando de una pensión con habitaciones pegadas unas a otra, todas muy chiquitas. El único que dio un dato relevante fue la dueño de la pensión que dijo que el domingo un hombre que solía alquilar se fue repentinamente”, explica una fuente de peso en el expediente.
Investigación y posible autor del crimen
La investigación del caso está a cargo del fiscal Ademar Bianchini, que ordenó distintas medidas de prueba. La primera tiene que ver con identificar y ubicar al hombre que tomó sus cosas y se fue el domingo. Puntualmente, lo que declaró la dueña de la pensión fue que Melani era una persona tranquila y que nunca había tenido problemas con nadie.
También se refirió a un vecino que se fue del recinto, el cual había llegado hacía pocas semanas al lugar y había tenido problemas con varios habitantes del complejo.
En las próximas horas se les tomará declaración testimonial a todas las personas que estaban registradas en la pensión.
