La Justicia le restituyó el beneficio de salidas transitorias a “El Pitu”, un conocido recluso que cumple varias condenas, entre ellas, el recordado crimen de la docente Claudia Oroná, quien fue asesinada en 2004 en la puerta de un jardín maternal del barrio Tres Estrellas, en Godoy Cruz. Dos ladrones que le quisieron robar el auto.
La medida fue dispuesta por el juez Sebastián Bragagnolo a pedido del abogado Francisco Machuca, el defensor de Ricardo Javier González Bustos, quien hoy tiene 38 años. El magistrado hizo lugar a un pedido de nulidad de una sanción que había recibido y en la que no se había seguido el procedimiento legal. El pedido fue acompañado por la fiscal de Homicidios Claudia Ríos.
Frente a esta situación se le restituyeron las salidas transitorias que le habían sido otorgadas tiempo atrás y que se le habían suspendido en los últimos meses, cuando el Servicio Penitenciario de San Luis sostuvo que, en la vuelta de una de las salidas, González había entrado con cuatro semillas de marihuana. El procedimiento fue deficiente, al punto que ni siquiera se acreditó si esas semillas eran de Cannabis.
Varias veces condenado por homicidio, siendo menor
El 1 de noviembre de 2004, al mediodía, la docente Claudia Oroná se retiró del jardín maternal “Estrellitas” y, al subir a su automóvil que se encontraba estacionado en el puente de ingreso, fue sorprendida por dos asaltantes, quienes al intentar robarle el vehículo le dispararon por el lado de la ventanilla del conductor.
Después de recibir el disparo, Oroná fue arrojada violentamente fuera del auto por los asaltantes al tiempo que subían con el objeto de huir en el vehículo. Pero, al activarse la alarma, desistieron y huyeron a pie. Oroná fue trasladada en un auto particular al hospital El Carmen, donde llegó prácticamente sin vida.
Si bien por la muerte de la maestra Oroná se hicieron dos juicios y se condenó a dos delincuentes, nunca se dio con el autor material. En mayo de 2006, “El Pitu”, fue sentenciado a 21 años de prisión, pero como coautor del homicidio. En septiembre de 2007, en otro juicio para determinar el autor material del crimen, se absolvió por el beneficio de la duda a Sergio Corvalán.
En febrero de 2006, González fue sentenciado a 23 años de cárcel por tres asesinatos: dos en Godoy Cruz y otro en Luján. En marzo de 2008 fue condenado por ser uno de los líderes de una fuga del ex COSE ocurrida en junio del 2005, junto a otros 11 internos menores.
Y en mayo de 2013 fue condenado a 4 años de prisión por haber participado del motín de junio de 2011 en el penal Almafuerte, cuando tomaron a seis penitenciarios como rehenes. Esta condena fue por el delito de privación coactiva ilegítima de la libertad agravada por amenaza y violencia.
En mayo de 2016, la Justicia Civil ordenó que el Estado provincial indemnizara la familia de la docente Oroná, que había demandado a la Provincia por daños y perjuicios, entendiendo que el Estado debió prestar seguridad a la docente. El Estado contestó la demanda advirtiendo que no es era responsabilidad custodiar las puertas de los colegios públicos.
Según un informe policial de la época, la Policía custodiaba el jardín maternal habitualmente durante “el ingreso, egreso y horarios de clase, pero surge claro que el día de la muerte de Claudia Oroná ese servicio no se prestó o se prestó en forma deficiente”. “Al no haber actuado, la Provincia incumplió la obligación de seguridad que tenía para con la maestra Oroná”, se puede leer en el fallo.
