Cuatro nuevos testigos que justificaron el accionar del policía de civil que abatió a un presunto ladrón en la plaza de San Martín, por lo que la fiscalía del Este volvió a cambiar la carátula de la causa. De homicidio agravado a homicidio agravado en legítima defensa, por lo que el uniformado quedará en libertad. “Lo atacaron por ser policía”, concluyeron los fiscales. Pese a esto, la investigación continúa.
Los nuevos testigos, todos aparecen en el video de la cámara de seguridad que grabó el hecho, ratificaron la versión inicial que indicaba que el domingo pasado a las 20.40, en la plaza San Martín dos jóvenes -Mariano Leonel Tello (21) y Daniel Gustavo Giménez Vega (18)- quisieron asaltar a un joven pareja estaba sentada en un banco. Resultó que el hombre era un policía que, tras ser golpeado y caer al piso, sacó su arma y abatió a Giménez. El otro agresor –Tello- le arrebató la pistola, se dio a la fuga y fue detenido minutos después.
La justicia determinó, tras la declaración del imputado, que más allá de una intención de robo, el ataque se originó porque los dos involucrados identificaron que el joven sentado en la plaza junto a su novia era policía. El suboficial aseguró: “Al pibe más alto (por Tello) yo lo conocía de un procedimiento”. Y agregó que en el primer intercambio verbal Tello lo increpó: “Comprame, no te haces el macho ahora que no estás vestido de Policía”, dijo antes de seguir insultando al policía para luego desatar un ataque físico contra él.
Las primeras pruebas indicaron que el suboficial actuó “en legítima defensa”: de hecho disparó desde el suelo, luego de caerse, durante una pelea en la que recibió una dura golpiza, resultando con varias lesiones en el cuerpo y la cabeza: los puntapiés recibidos le produjeron una triple fractura en la zona nasal, entre otras lesiones.
Sin embargo, su situación procesal cambió drásticamente cuando fue acusado de homicidio agravado al poner en duda la situación de robo. Pero con la declaratoria de los cuatro nuevos testigos la causa regresó a “Legítima defensa”.
El cómplice del joven abatido, imputado
Tello fue imputado por homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma. Es decir que se lo responsabiliza por la muerte de su amigo, tal como lo establece la ley para este tipo de situaciones en las que el robo o la tentativa terminan generando una muerte.
Además, los fiscales investigan si Tello, tras arrebatarle el arma al subayudante de 23 años de la Policía de Mendoza, le quiso disparar al uniformado pero la corredera del arma se trabó, ya que en el lugar del hecho se encontraron en el piso además de tres vaina vacías, dos balas sin detonar. Si esta acción llega a comprobarse, el detenido podría recibir otra imputación, ahora por tentativa de homicidio agravado.