Sociedad
Primera polémica vendimial: las reinas se quejaron y pidieron que vuelva una tradición muy especial
hace 3 horas
Eugenia Bosco (27), nacida el 12 de junio de 1997 en San Pedro, tiene una vida “anfibia”, casi literalmente. La destacada regatista argentina se ha ganado un nombre a nivel internacional en el mundo náutico tras la medalla de plata que obtuvo en los Juegos Olímpicos de París 2024. Su lucha por llegar a la élite mundial del deporte acuático y su crecimiento personal van de la mano.
Desde muy chica se metió al agua y nunca más salió. Se inició en la vela influenciada por su hermano, compitiendo en categorías como Optimist y F18 antes de especializarse en Nacra 17. Desde 2017, forma equipo con Mateo Majdalani, con quien ha desarrollado una sólida carrera internacional.
Ya con las preseas en su cuello, en 2019 ganaron junto a Majdalani la medalla de plata en los panamericanos de Lima; en 2023 lograron la dorada en Santiago, pero el máximo sueño llegó el año pasado cuando llegaron al segundo peldaño del podio en París 2024, Eugenia se animó a denunciar algo que la atormentaba desde su pre adolescencia.
La deportista olímpica presentó una denuncia por abuso sexual contra su exentrenador de Optimist, la clase formativa de vela y por la cual estuvo bajo su guía entre los 11 y 12 años.
La Nación pudo averiguar que el impliado, Bosco no lo nombró públicamente, es Leandro Tulia, que trabaja desde hace 20 años en el Yacht Club Olivos (YCO). Tulia está licenciado de su cargo, justamente a raíz del conocimiento de la acusación, que quedó radicada en la UFE Género de Vicente López, a cargo de la fiscal Lida Osores Soler, detalla ese medio.
El diario La Nación se contactó con todas las partes involucradas. A través de su abogado, Tulia negó las acusaciones. Por su parte, la Comisión Directiva del YCO declaró mantenerse “neutral” frente al caso. Asimismo, tras la denuncia presentada por Bosco, se sumaron otras tres acusaciones contra el entrenador, también realizadas por regatistas que en ese momento tenían edades similares.
Bosco expuso que en su denuncia una perversa manipulación por parte del denunciado para con las alumnas y alumnos, preadolescentes, que llegaban desde otras ciudades para alojarse en las instalaciones del YCO para entrenar. Según su relato, Tulia les pedía “favores” a cambio de que puedan usar celulares, computadoras o hasta subirse a una mejor embarcación para entrenar.
Ella asegura que fue abusada en la habitación de Tulia cuando ella tenía 12 años. “Sabía que había algo en mí, no sabía de dónde venía, pero sabía que había algo. Y cuando esto vino a mi mente empecé a entender un montón de cosas. Pasé por mil etapas de vergüenza, de no aceptarlo, de pensar que yo era la culpable. Después de un tiempo lo puse en la mesa y dije: ‘Yo era chica, no tenía el control de esta situación’”, confesó a La Nación.
