El máximo tribunal, tras analizar el caso, consideró que es correcta la pena que recibieron Fabián D’agostino y su hijo Axel D’agostino por la muerte de Franco y Kevín Álvarez, quienes fueron baleados y luego dejados en la laguna El Viborón.
Fabián D’agostino (54) y su hijo, Axel D’agostino (24), condenados por el asesinato de los hermanos Franco y Kevin Álvarez. | Foto: prensa Poder Judicial.
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La Suprema Corte de Mendoza confirmó la sentencia a prisión perpetua de los asesinos de los hermanos Franco (28) y Kevin Álvarez (18), quienes fueron encontrados sin vida en junio de 2021 en la laguna El Viborón, en Maipú, tras una búsqueda que se prolongó durante 20 días.
En noviembre de 2023 un tribunal popular encontró culpables a Fabián D’agostino (54) y su hijo Axel D’agostino (24) por el delito de " homicidio agravado por alevosía en concurso ideal con homicidio agravado por el empleo de un arma de fuego" por lo que fueron condenados a prision perpetua.
Pero la defensa fue en casación a la Corte, solicitando que el máximo tribunal revisara la sentencia condenatoria, sosteniendo entre otras cosas que el jurado popular no explicó los motivos de su decisión y, entonces, quedó como referencia la teoría de fiscalía que, para ellos, no pudo ser probada, indicando que no se conocieron ni el lugar ni el día del homicidio, ni el lugar donde permanecieron durante 20 días.
En su fundamentos la Corte -con la firma de Mario Adaro, Omar Palermo, María Teresa Day, José Valerio, Dalmiro Garay y Julio Gómez- entendió que quedó probado que los D’agostino contrataron a los hermanos Álvarez para trabajar como albañiles en una obra y que "la falta de pago por los trabajados realizados, lo que derivó en amenazas recíprocas entre las partes".
"En cuanto al día y el lugar en que habrían acontecido los decesos de las víctimas –contrariamente a lo sugerido por la defensa– de la prueba que sostiene la teoría del caso de la acusación surge que existen indicios suficientes que permiten sostener la postura de las partes acusadoras, es decir, que aquéllas tuvieron lugar el día 7 de junio de 2021 en el lote de Vicente D´agostino", advierte el fallo.
Otro punto señalado es que el GPS del teléfono de Kevin marca la obra donde se iban a juntar víctima y victimarios y que a la misma hora y en el mismo lugar, se determinó que también estaba el teléfono de Axel D’agostino.
"La postura de la defensa no es más que una conjetura carente de mayores sustentos. Ello se evidencia en que, como se analizó, el veredicto del jurado se sustenta de manera razonable en las pruebas incorporadas al debate, y de acuerdo con las instrucciones impartidas sobre la ley aplicable al caso", argumentaron desde la Corte.
Los cuerpos de Franco y Kevin Álvarez, fueron encontrados el lunes 27 de junio s 17.20, cuando una persona llamó al 911 e indicó la presencia de dos cadáveres en la laguna El Viborón, en Maipú.
Fue una mujer quien allí se percató de la presencia de una persona sumergida observando un brazo y un pantalón color azul entre medio de ramas.
Ya con la llegada de la Policía al lugar, advirtieron que eran dos los muertos. Uno con zapatillas negras y remera mangas largas oscuras; y el otro, con zapatillas blancas y pantalón de jean. Luego se determinó que eran hombres, de contextura delgada y en evidente estado de descomposición.
Según su madre, en la siesta del lunes 7 de junio pasado, ella –Beatriz Fretes- y sus dos hijos Franco y Kevin Álvarez tomaron un colectivo en Colonia Bombal, Maipú, donde vivían y cerca de las 15.30 llegaron a Rodeo del Medio, donde los jóvenes se bajaron, en tanto que la madre siguió viaje.
La mujer explicó a los investigadores que ellos iban a cargar una tarjeta de colectivo para luego tomar un micro con destino a Los Corralitos, Guaymallén, donde pretendían cobrar un trabajo de albañilería.
Cerca de las 21.45, como no habían llegado, la madre los llamó por teléfono y le contestaron que estaban esperando que les pagaran para volver, algo que luego la Policía corroboró como cierto. Esa fue la última comunicación que tuvieron con su madre. Minutos más tarde el teléfono de Kevin Álvarez se apagó.
Al día siguiente, la madre de los muchachos buscados se desesperó y llamó a un conocido que estaba en Rodeo del Medio y esa persona fue a la comisaría a poner la denuncia. Sobre el mediodía, personal de Investigaciones se comunicó con la madre de los jóvenes para entrevistarla y obtener más datos sobre la desaparición que terminó siendo un doble homicidio.
