El tranquilo entorno del lago San Miguel, ubicado en el parque 9 de Julio en la ciudad de San Miguel de Tucumán, fue alterado por un curioso robo. Tres patitos recién nacidos fueron sustraídos el pasado fin de semana, generando preocupación entre los visitantes y el personal de mantenimiento del parque.
De acuerdo con informes del municipio, los responsables del hecho fueron tres menores de edad que aprovecharon la gran cantidad de personas que visitaban el parque para llevarse a las crías de pato. Tras una rápida búsqueda, los animales fueron encontrados en las inmediaciones del Museo de la Industria Azucarera, conocido como la Casa Obispo Colombres.
Luciano Chincarini, secretario de Servicios Públicos, habló sobre el incidente y las acciones que se están tomando para evitar que vuelva a suceder. “Este tipo de episodios nos recuerda la importancia de cuidar los espacios públicos y a la fauna que habita en ellos. Si bien ya contamos con un esquema de seguridad, es necesario reforzarlo para proteger a los animales del parque”, expresó el funcionario.
El robo de los patitos, que se encontraban buscando alimento cerca de la orilla, resalta la vulnerabilidad de las especies que viven en el lago, particularmente durante momentos de alta concurrencia de público. “A pesar de los esfuerzos del equipo de mantenimiento y seguridad, no fue posible evitar el incidente, dado el gran flujo de personas durante el fin de semana”, agregó Chincarini.
En respuesta, el municipio está evaluando la instalación de medidas de seguridad adicionales, como la colocación de rejas y cercos en algunas áreas del lago, aunque Chincarini enfatizó que estas acciones no deben interferir con el acceso libre de los ciudadanos. “La prioridad es mantener el equilibrio entre la protección de los animales y el disfrute del parque por parte de la comunidad”, comentó.
El funcionario también destacó la importancia de la conciencia ciudadana en la preservación de los espacios naturales y llamó a los vecinos a colaborar en la protección de la fauna del lugar. “Es fundamental que todos nos comprometamos a respetar y cuidar estos entornos. Los recursos naturales son de todos y su conservación depende de la responsabilidad compartida”, concluyó.
Finalmente, Chincarini aseguró que el estado del lago ha mejorado notablemente en los últimos tiempos, gracias a las tareas de mantenimiento y limpieza. “El agua del lago es pura, proviene de napas subterráneas, y la fauna está en buen estado. Continuamos trabajando para asegurar un equilibrio ecológico que permita disfrutar del parque en su totalidad”, afirmó.
Con estas medidas, el municipio busca garantizar la seguridad y bienestar tanto de los visitantes como de los animales del parque, evitando que incidentes como el robo de patitos se repitan en el futuro.