Imputaron a Ángelo González, el nieto de los abuelo que fueron asesinados a puñaladas en una finca de Las Heras. La fiscal de Homicidios, Claudia Ríos, caratuló el caso cómo “homicidio agravado por el vínculo dos hechos en concurso real”, cuya pena en expectativa es la de prisión perpetua.
Martin Farías (76) y Justa Del Valle (66) vivían en una finca ubicada en la calle Santa Rosa, del distrito La Cienaguita, y el lunes en la noche el hombre que les alquilaba los corrales para guardar sus caballos llegó alrededor de las 22.30 y los encontró muertos. Según las primeras averiguaciones el joven de 22 años tenía una relación tirante con sus abuelos y que en ocasiones llegó a la violencia física contra ellos.
El ahora imputado deberá someterse a una serie de estudios para determinar si es inimputable, mientras que desde la fiscalía esperan los resultados de las pericias que solicitó y que serán clave, informó Télam.
Los allegados al matrimonio aseguraron que González tendría una importante adicción a las drogas. Además, cuando su nombre fue buscado por los pesquisas en los archivos de la Policía se supo que tenía antecedentes.
El 6 de julio de 2020 fue detenido portando una pistola calibre 22, luego de intentar asaltar a un joven en Las Heras. Por el hecho debió cumplir prisión domiciliaria y quienes le ofrecieron su vivienda para ello fueron sus abuelos. El matrimonio se hizo cargo de su custodia y el muchacho pasó un año encerrado en la casa de sus abuelos maternos.