Hallaron una cabeza y torso humanos incinerados en el asentamiento La Quebrada, de Godoy Cruz, a metros del domicilio de Franco Ábrego (26), más conocido como “Cara Cortada”, actualmente detenido e imputado como presunto autor del crimen de Lucas Nahuel Ampuero (25). Justamente, los restos serían de este joven, de quien ya se habían encontrado partes de su cadáver a principios de mes en esa misma zona del oeste mendocino.
Según indicaron fuentes policiales, el macabro hallazgo de la cabeza y el torso se dio el sábado por la tarde cuando un grupo de niños jugaba en calle El Carrizal, precisamente detrás de un cerro en las cercanías del mencionado asentamiento, a pocos metros de donde reside el “Cara Cortada”.
Los restos humanos estaban dentro de una bolsa con cal, justamente en un sector del piedemonte mendocino que ya había sido rastrillado con la aparición del cuerpo desmembrado y quemado de Ampuero.
Ahora, personal de Policía Científica y de la División de Homicidios, bajo directivas de la fiscal Andrea Lazo, avanza hacia el cotejo de ADN para determinar fehacientemente si la cabeza y el torso son de Ampuero, como se sostiene por estas horas.
El crimen de Ampuero y la imputación del “Cara Cortada”
Vale recordar que Ampuero desapareció el 26 de febrero pasado en el oeste “caliente” de Godoy Cruz, conocido por los hechos de violencia. En aquella ocasión, lugareños señalaron que al joven lo habían visto con Franco Ábrego, más conocido como “Cara Cortada”, quien supo ser un “angelito” de “La Jaqui” Vargas, condenada por narcotráfico y lavado de activos en mayo de 2016.
La hipótesis de los pesquisas es que Lucas Ampuero tuvo un problema con el “Cara Cortada”, quien lo descuartizó y quemó sus restos.
Como ya informó Los Andes, “Los Angelitos” de La Jaqui eran su brazo armado para “ajusticiar”, amenazar y marcar el territorio ante sus enemigos del negocio narco. Entre esos jóvenes sicarios se destacó el “Cara Cortada”, quien consiguió su apodo por una cicatriz en su rostro, que fue borrada mediante una cirugía plástica por orden del Ministerio de Salud en junio de 2014, cuando tenía 17 años.
Los investigadores tienen como principal hipótesis que Ampuero había empezado a trabajar para el joven narco y, por razones que se investigan, fue ultimado a sangre fría.
Hay testigos que aseguran que el domingo 5 de marzo se escucharon disparos en la casa de Nora Beatriz Díaz, la madre del “Cara Cortada” que ahora es buscada por la Justicia por su participación en el homicidio de Ampuero.
Otros testigos dicen que vieron salir humo de esa vivienda. También se sabe que a Ampuero lo habrían asesinado en el patio de esa vivienda y que la madre de Ábrego estaba presente. Un testigo contó incluso que habría escuchado un disparo y, al asomarse, vio el cuerpo de un hombre en el suelo y escuchó a la madre del detenido decir: “Dejá, dejá, vamos”.
Después de la desaparición y la detección de los restos incinerados de Ampuero, la Justicia empezó a buscar al “Cara Cortada”, quien terminó entregándose el 6 de marzo pasado. Estaba en una escuela de Medrano, Rivadavia. Fue imputado por el delito de “homicidio agravado por el uso de arma de fuego y agravado por ensañamiento”.