Una jubilada de 82 años fue hallada sin vida en su residencia en Pehuajó, Provincia de Buenos Aires, el martes. La víctima, María Ester Suquía, fue descubierta con una bolsa de plástico en la cabeza y un pañuelo en la boca. En la casa, además de la difunta, se encontraba su hijastra, Graciela Emilce Rubini, de 47 años, quien fue detenida en relación con el crimen.
El alarmante incidente fue reportado al 911 alrededor del mediodía, lo que llevó a la intervención de la policía. Al llegar a la escena, encontraron el cuerpo de Suquía en una cama, con un almohadón cerca. La presencia de este elemento inicialmente sugirió que la causa de la muerte podría haber sido asfixia mecánica.
La hijastra de Suquía, Graciela Emilce Rubini, alegó que se trataba de un suicidio, afirmando se trataba de un suicidio porque su madre ya en “otra oportunidad había intentado quitarse la vida”.
Asimismo, expresó que estaba “harta” de cuidar a su madre, quien padecía graves problemas de salud y estaba postrada en cama. El comisario César Arbizu precisó: “Me refirió que estuvo internada durante un tiempo en un hospital y por decisión de ella misma fue que le dieron el alta a Suquía, y continuó a su cuidado”.
Arbizu, en una conferencia de prensa local, señaló que las cámaras de seguridad en la entrada de la casa no registraron la entrada ni salida de ninguna persona, además de Rubini y Suquía. Esto, junto con las declaraciones de Rubini y el hallazgo del almohadón junto al cuerpo de la jubilada, levantaron sospechas sobre la posible implicación de Rubini en el crimen. Como resultado, fue detenida bajo cargos de homicidio calificado.
El caso está siendo investigado por el fiscal Luis Caldentey de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 7 de Pehuajó. La fiscalía aguarda los resultados de la autopsia y las pericias psicológicas de Rubini para determinar los pasos a seguir en la causa. Se espera que Rubini sea trasladada a la fiscalía en las próximas horas para prestar declaración.