Tras el brutal ataque que sufrió, Débora, la mujer que fue apuñalada 28 veces por su expareja en una pizzería en el barrio porteño de Núñez, declaró por primera vez y aseguró que Sergio Sarria la quiso matar “como un animal”.
“Entró por la fuerza, atacó a mi compañero, después me atacó a mí. Me atacó con una navaja, algún cuchillo que él trajo, después con un cuchillo con el que yo trabajo en la pizzería”, relató la víctima en diálogo con El Trece. Y destacó: “Es un cuchillo como de carnicero. Gracias a Dios no estaba tan afilado”.
Tras recibir el alta médica, Débora compartió un audio en el que relató el angustiante ataque que sufrió y explicó que, en ese momento, lo único que pensaba era en encontrar una forma de huir de su agresor.
“Me quiso matar como un animal, la verdad. Cuando me atacó no me dijo nada, mientras me atacaba tampoco me decía nada, sólo sé que me pegaba, me pegaba, me pinchaba por todos lados. Todas las puñaladas que tengo son en las costillas, en el cuello, en la cara, en el ojo. Fue terrible, aterrador”, expresó la víctima.
Y luego, agregó: “Tengo un corte re grande en el codo porque justamente con ese cuchillo me cortó. Milagrosamente no logró matarme, creo que en gran parte por la ayuda que recibí porque lo trataron de golpear, de quitármelo de encima, pero estaba furioso”.
Sabiendo que el final podría haber sido distinto, la mujer expresó su gratitud a su compañero de trabajo y a los vecinos que intervinieron, impidiendo que se convirtiera en una nueva víctima de femicidio.
Sarria y Débora compartieron 23 años de relación y tuvieron una hija. Según el relato de Débora, la relación estuvo marcada por la violencia, aunque ella nunca se atrevió a denunciarlo. “Siempre supuse que si lo denunciaba le hacía algún tipo de daño. Nunca pensé en mí”, lamentó.
Mientras ella sigue con su tratamiento ambulatorio para completar la recuperación de sus heridas, su ex pareja permanece detenido e internado ya que después del intento de femicidio intentó quitarse la vida clavándose un cuchillo en el cuello.