Sin novedades sobre el paradero, los investigadores que trabajan en la desaparición de la adolescente Florencia Romano (14) se encuentran a la espera de las pistas que pueden arrojar algunas pruebas recolectadas en la casa de la pareja detenida, el carnicero Pablo Ramón Arancibia (33) y su pareja, Micaela Estefanía Méndez (27).
El punto neurálgico de la investigación es, en este momento, la casa de los detenidos, ubicada en el pasaje Berra, a metros de Padre Vázquez al 2.500, en Gutiérrez. Esto porque en ese lugar se apaga el teléfono de Florencia y, por otra parte, la niña no vuelve a subir al colectivo, tal como lo dijo Arancibia, pues su tarjera SUBE solo registra el viaje de llegada y no de partida.
Las preguntas que se hacen los investigadores
Así las cosas, las preguntas que se hacen policías y fiscales de Homicidio son estas: ¿Florencia salió o no salió nunca de la casa? Por eso quieren ver si alguna cámara de seguridad la registró caminando por Padre Vázquez. También quieren ver si los teléfonos de carnicero y su mujer, pueden arrojar alguna pista sobre la niña.
Pero también están a la espera de lo que puede arrojar algunos análisis de ADN. Ayer en la casa de los detenidos se tomaron algunas muestras de ADN y hoy se tomaron muestras de los padres de Florencia para poder hacer un análisis comparativo. Un dato importante: se tomaron algunas muestras de sangre que, en principio podrían no ser humanas, dada la profesión del detenido.
Por otra parte, otra de las preguntas que se hacen los investigadores es esta: ¿por qué la pareja no llamó al 911, denunciando que la adolescente estuvo en su casa, cuando la imagen de la cara de la chica estaban en todos los medios de Mendoza y en las redes sociales?
Otra pregunta que todos se hacen: si por lo general los adolescentes no se separan de sus teléfonos ni un minuto, ¿fue ella quien apagó su celular o se lo quitaron?
Los perros entrenados indican que Florencia llegó a la casa de los detenidos y ahí perdieron el rastro. El detenido no tiene auto –solo un viejo vehículo abandonado en la puerta- y no hay registro de que subiera a un colectivo. Entonces, ¿cómo salió de la casa? Y, ¿a dónde fue?
Por lo pronto, en la fiscalía de Homicidios están esperando algunas pruebas para imputar a Arancibia y Méndez, quienes están alojados en dos comisarías distintas y no han declarado, salvo una declaración espontanea del carnicero. Analizando el caso, la única imputación posible es la de homicidio, ya que no se puede podría hablar, hasta el momento, de un caso de privación ilegítima de la libertad pues no se sabe donde está Florencia.
La detención
Ayer por la tarde, la policía realizó un allanamiento en una vivienda ubicada en el pasaje Berro de Gutiérrez, Maipú, donde vive la pareja conformada por Pablo Ramón Arancibia y Micaela Estefanía Méndez quienes fueron detenidos y quedaron a disposición de la Fiscalía de Homicidios.
Según trascendió, el hombre admitió que la adolescente estuvo en su casa durante tarde del sábado pero luego, cerca de las 19, se fue de la vivienda y se tomó un colectivo. También que él se había contactado con ella a través de Instagram.
Los investigadores sabían que la chica había ido de su casa, en Rodeo de la Cruz, Guaymallén hasta Gutiérrez Maipú, en colectivo ya que rastrearon el movimiento de la tarjeta SUBE. Pero ese segundo viaje informado por el carnicero, nunca se hizo, pues no está registrado en el movimiento de la tarjeta.
Florencia Agustina Romano mide aproximadamente 1.50 metros; es de tez blanca, cabello oscuro lacio con flequillo abajo del hombro, de contextura delgada y tiene un piercing en la nariz del lado izquierdo.
Cuando salió de su casa por última vez tenía la siguiente vestimenta: remera musculosa de color rosado, jean corto verde flúor, zapatillas negras verde flúor, y portaba una mochila negra.
Quien pueda aportar datos por favor comunicarse con la oficina fiscal 19, a los teléfonos 4416982/83/84 ó al 911.