Analuz Pippia, la niña de 10 años que fue aplastada por un portón en la tarde del jueves, en medio de la tormenta que azotó la zona este de Mendoza, se encuentra en terapia intensiva, en coma inducido y con fracturas de cráneo y rostro. Su familia pidió una cadena de oración, mientras la menor permanece internada en el hospital Notti.
“Les pido que oren por mi hermana Analuz Pippia. Su estado es muy crítico y necesita de un milagro para salir adelante”, escribió una de sus hermanas y decenas de mensajes con el mismo sentido inundaron las redes sociales, entre la noche del jueves y el transcurso de este viernes.
Analuz sufrió un gravísimo accidente a las 19.50 del jueves, cuando fuertes ráfagas de viento azotaban la zona de Junín y ya habían sido origen de una feroz tormenta en Santa Rosa.
La niña se encontraba junto al portón de ingreso de vehículos de la casa 7 de la manzana A, del Barrio Semiprivado Solares de la Posta, en la calle homónima, casi esquina 9 de Julio, en el distrito de La Colonia, en Junín
El padre de la niña estaba ingresando el auto a la propiedad para preservarlo de posible caída de granizo y Analuz se encontraba esperando en la vereda.
Una ráfaga de viento se embolsó contra el portón, hizo que la estructura metálica, de 2,20 de alto por 3,50 de largo aproximadamente, se desprendiera del carril sobre el que se debía desplazar y cayera sobre la niña, cuyo cuerpo quedó entre el portón y la vereda de hormigón.
La familia no esperó la ambulancia y trasladó ella misma a la menor hasta la Guardia del Hospital Alfredo Ítalo Perrupato. Allí estabilizaron a la niña e implementaron su inmediato traslado hasta el hospital pediátrico Humberto Notti.
El informe médico brindado sobre el mediodía de este viernes, informaba que la paciente era: “Politraumatismos; traumatismo encéfalo craneano grave; fractura de macizo facial, con respiración artificial y coma inducido”.
Las redes se llenaron de ruegos, pidiendo por la recuperación de la niña. Con las lesiones graves de la menor, son dos las personas afectadas por la tormenta de este jueves. Esa tarde un joven de 22 años falleció en Las Catitas, aplastado por un árbol.
Ese hecho se produjo en calle Benegas, a la altura del kilómetro 942 de la Ruta 7. Allí Leandro Andrés Castro había salido a tratar de cubrir su auto del granizo, cuando el viento hizo caer un árbol, que lo aplastó y le causó lesiones fatales.