Esta mañana, un grupo de vecinos de la zona de Chacarita encontró el material radiactivo que había sido robado el martes pasado en Saavedra. El hallazgo se produjo en un contenedor de basura ubicado en la calle Charlone al 3100, el mismo contenedor en el que se había encontrado previamente la caja que transportaba el material.
Tras el descubrimiento, los vecinos dieron aviso a la Policía de la Ciudad, que inició un operativo con su División Delitos contra la Salud y Seguridad Pública. Se procedió a cortar la calle como medida preventiva ante el posible riesgo. Además, la Policía de la Ciudad contactó a la Policía Federal, que tiene jurisdicción en la materia a través de su División Riesgo Radiológico y Nuclear, y a la Fiscalía Núñez-Saavedra, a cargo del fiscal José Campagnoli y el secretario Andrés Galarte.
LOS DETALLES Y LOS RIESGOS DEL MATERIAL ROBADO
El material robado, utilizado en tratamientos oncológicos, fue sustraído de una empresa de medicina nuclear en la calle Arias al 4400 en Saavedra durante una descarga de transporte. El chofer que trasladaba el producto informó sobre el robo a la Comisaría 12A de la Policía de la Ciudad. La División Riesgo Radiológico y Nuclear de la Policía Federal, junto con el Ente Regulador Nuclear, confirmó que el material sustraído era una cápsula de plomo con un envase que contenía 45 mililitros de yodo-131 (I-131), una sustancia radiactiva utilizada en medicina nuclear.
El contacto con esta sustancia puede producir efectos como vómitos, mareos y quemaduras, aunque no sería letal debido a la poca cantidad. La caja que transportaba el material fue encontrada vacía en el mismo contenedor el martes pasado por la noche. Las mediciones radiológicas realizadas por la Policía de la Ciudad dieron resultados negativos.
El nuevo hallazgo dio una pista para detectar quién cometió el robo y posteriormente descartó el material. Según las sospechas iniciales de los investigadores, es probable que el ladrón no supiera qué estaba robando. El equipo del fiscal Campagnoli ordenó revisar de cámaras en la zona del robo y del hallazgo de la caja para intentar determinar la ruta de escape del autor del robo.