El locutor Edgardo Montivero (53) fue condenado a prisión perpetua este lunes por los asesinatos de sus suegros, Francisco Rodríguez (69) y Raquel Gómez (72), ocurridos en junio del año pasado, en Chacras de Coria.
Montivero aceptó esta mañana un juicio abreviado, convenido entre las fiscalía de Homicidios y el defensor del imputado, por el delito de homicidio criminis causa y robo agravado por uso de arma, en dos casos. Se declaró culpable y recibió la única pena posible para este delito, es decir la perpetua.
El 7 de junio del año pasado los cuerpos de Francisco Rodríguez y Raquel Gómez fueron hallados en la casa donde vivían, ubicada en Larrea y Beltrán, de Luján.
La hija de las víctimas y su pareja –Montivero- llegaron a la vivienda y los encontraron sin vida. Llamaron al 911 y comenzó la investigación, que pocas horas después los puso como sospechosos tras sus confusas declaraciones y luego de que ellos mismos contaran que habían movido los cadáveres.
La hija quedó libre por falta de pruebas. En cambio, la situación de su pareja se complicó con dos indicios muy fuertes: el geoposicionamiento de su celular lo ubicó en la vivienda de sus suegros la noche de los homicidios y además se detectó su sangre en la escena del crimen.
El hombre habría forcejeado con las víctimas y en ese momento se lastimó la mano. El hombre declaró que se había lastimado al romper una compotera mientras lavaba los platos.
Los investigadores, comandandos por el fiscal de Homicidios Gustavo Pirrello, determinaron que el acusado mató al matrimonio para ocultar un robo de 6.000 pesos. Ahogado por deudas, el locutor habría ido en busca de dinero a la casa de los suegros y encontró resistencia a sus planes.
Montivero era conocido Luján porque trabajó en radios locales y en el área de prensa de la municipalidad por lo que se lo podía ver en actos políticos, eventos deportivos y Vendimias.