La causa que investiga el homicidio de Enrique Cano, un adulto mayor de 81 años que fue hallado sin vida en el comedor de su casa en Los Campamentos, tuvo novedades luego de que la fiscalía de Rivadavia Junín diera con el presunto asesino. Se trata de un amigo de la víctima que vive cerca.
El pasado 31 de agosto, vecinos de la calle La Florida dieron aviso al 911 porque llevaban días sin ver a “Canito”, como lo llamaban cariñosamente. Minutos más tarde, los uniformados hallaron al anciano sin vida yaciendo en el comedor de su casa, la cual estaba toda revuelta dejando en evidencia que habían entrado con el único objetivo de robarle.
Tras una ardua investigación en manos del fiscal de Rivadavia Junín, Carlos Giuliani, este jueves detuvieron a un amigo de la víctima fatal. Se trata de un vecino del mismo distrito, que resultó sospechoso del crimen luego de que los sabuesos encontraran en su casa ropa y accesorios de Cano.
Cuando los efectivos allanaron la casa del único detenido encontraron una campera, un pantalón, una camisa y un par de zapatos que pertenecían al hombre de 81 años, quien falleció tras recibir un fuerte golpe en la cabeza.
Según especificó el Cuerpo Médico Forense en un adelanto de autopsia, Cano tenía lesiones en todo su cuerpo y también presentaba signos de ahorcamiento en su cuerpo. A los días, la Policía Científica halló en la vivienda más de 500 mil pesos en efectivo, por lo que tomó fuerzas la hipótesis de que fue un homicidio por robo.
Ahora la fiscalía del Este deberá esperar los cotejos de ADN que se están realizando sobre las prendas halladas, para poder saber cuál será el futuro del aprehendido. A partir de esos resultados el representante del Ministerio Público Fiscal deberá tomar la decisión de imputarlo o dejarlo en libertad.
