La Justicia parece haber desbaratado a una banda de delincuentes que cometía diferentes asaltos, liderados por una mujer. Entre los detenidos hay un gestor y en unos de los hechos se los acusa de balear a un policía retirado que defendió a su padre en un intento de robo en Dorrego.
El trabajo en coordinación de las fiscalías de Homicidios y de Robos y Hurtos, más el apoyo de efectivos de distintas dependencias, permitieron el arresto de una joven, su novio y dos sujetos más, sindicados en varias causas. Por ejemplo, se cree que asaltaban a personas luego de ofrecer cambio de dólares a través de Marketplace y de citarlas en algún lugar.
Estos sitios normalmente eran departamentos del Gran Mendoza que alquilaban con DNI robados, y donde las víctimas se presentaban y eran atendidas por “gente bien vestida”, informaron las fuentes. Minutos después de esto, los delincuentes procedían a amenazar con armas de fuego y a hacerse del dinero.
Intento de robo y de homicidio
Además de la modalidad mencionada, los cuatro sospechosos-de quien por ahora se reserva su identidad-habrían participado de un atraco en el que un ex uniformado quedó al borde de la muerte.
Carlos Almazan (51), quien terminó su carrera en la Policía como Cabo Primero, estuvo internado en el Hospital Central en muy grave estado por una herida de arma de fuego que sufrió en el abdomen y que puso en riesgo su vida, hasta que de a poco se fue recuperando. También fue baleado en un glúteo y en la pierna derecha.
Al nosocomio llegó el viernes 7 de mayo pasado por la tarde, luego de un ataque en la casa de su papá, en calle Pedro Vargas al 700 de Dorrego, Guaymallén. Su progenitor, identificado como Carlos Dalmiro Almazan (84), también resultó afectado por un disparo en la pierna derecha, a la altura de la rodilla, pero que no no comprometió su situación.
El hombre mayor fue quien recibió a los delincuentes cuando golpearon la puerta de su vivienda. El señor esperaba que llegara un mecánico, sin embargo, se encontró con dos sujetos armados que lo obligaron a ingresar a punta de pistola.
Al ver esto su hijo comenzó a forcejear con uno de los malvivientes, y a partir de ahí empezaron los disparos. El objetivo de los agresores era robar, pero de la propiedad se fueron sin ningún objeto de valor.
Los acusados en este asalto son los integrantes de esta gavilla que cayó ahora, integrada por una mujer y tres sujetos. Ella sería la cabecilla del grupo y la encargada de organizar los golpes, previo obtener la información sobre las víctimas y su poder adquisitivo. “Utilizaba su buena presencia para acercarse a la gente”, precisaron los investigadores.
Sus cómplices serían su pareja, quien es gestor y obtenía detalles de diversas transacciones que se harían por inmuebles, y dos hombres más.
Los cuatro fueron arrestados y están a disposición del fiscal Gustavo Pirrello por la tentativa de Homicidio criminis causa-intentar matar para ocultar otro delito-, en tanto que los fiscales de Robos y Hurtos resolverían sus causas por los asaltos.