Con la detención de un hombre y la imputación de los dos sospechosos que habían sido aprehendidos durante las excavaciones para dar con Abigaíl Carniel, la adolescente de 18 años desaparecida desde el último 15 de abril, avanza la pesquisa. Al posible móvil narco se le sumó la imputación por femicidio, es decir que los investigadores imaginan el peor escenario.
Por la tarde de ayer un tercer hombre fue detenido por la desaparición de la joven de Las Heras. El sospechoso, de apellido Chumacero y de 42 años de edad, fue arrestado por efectivos de la División Homicidios bajo el mando del fiscal Carlos Torres durante un allanamiento en una vivienda ubicada en calle Tierra del Fuego al 300 del barrio Bombal, en Ciudad.
En el lugar los sabuesos secuestraron dos teléfonos celulares y una tarjeta Red Bus a nombre del detenido. “Se encuentra por el momento involucrado en la desaparición de la ciudadana buscada”, se limitaron a comunicar fuentes oficiales.
Mientras tanto continúan los operativos para encontrar a Abigaíl en los barrios Infanta y Sargento Cabral y también en el asentamiento 12 de mayo de Las Heras, donde reside la familia de la joven.
Precisamente en el Sargento Cabral viven los dos sujetos que en las últimas horas fueron imputados por Torres. El fiscal consideró que son responsables del homicidio agravado por mediar violencia de género de Abigaíl.
Según trascendió, los jóvenes apodados “Fido” y “Chupete” ya estaban “marcados” por estar vinculados a la venta de droga al menudeo en la zona. Incluso habría algunas escuchas telefónicas ordenadas por la Justicia Federal que los comprometerían a ambos. Se cree que la joven se quedó con algunas drogas y los ahora imputados la “ajusticiaron”. Al parecer, la muchacha era cercana o conocía a estos sujetos.
Hay dos datos extra: la joven también consumía y en las inmediaciones de la cancha donde se realizó el operativo de búsqueda existiría venta al menudeo. Los investigadores no habían elegido al azar los sitios donde realizar los rastrillajes ya que la joven residía en esa zona cercana a la avenida Regalado Olguín y se movía por el área. Además, la última persona que estuvo con ella -una amiga apodada “Nené” y 28 años mayor que ella- sostiene que la noche del 15 de abril regresaban del Centro en micro cuando la chica se bajó en el barrio Sargento Cabral.
Pasadas las 19 del martes, uno de los perros rastreadores que habían sido utilizados para la búsqueda comenzó a ladrar con insistencia sobre una cancha de fútbol y señaló un espacio contiguo de contrapiso recientemente realizado. Luego de este indicio se convocó a los bomberos, quienes empezaron a romper para saber si allí hay rastros de Abigaíl. Las tareas se extendieron por largas horas hasta entrada la noche, con la ayuda de una máquina retroexcavadora. Pero el resultado fue negativo y quedó visible al día siguiente con la luz del sol.
Mientras los pesquisas excavaban, dos muchachos y una mujer se acercaron y se presentaron como los responsables del lugar, por lo cual quedaron demorados. Se trataba de “Fido” y “Chupete”, que fueron arrestados ahí mismo, en el predio ubicado detrás del ex club Jorge Newbery. Junto a ellos fue aprehendida una mujer, que horas después recuperó la libertad.
El Ministerio de Seguridad mantiene vigente la recompensa de 200.000 pesos para quien aporte datos fehacientes que peritan hallar a Abigaíl pero el hermetismo reina en los barrios que la muchacha frecuentaba debido al temor a los narcos que operan allí.