Una jubilada de 72 años, llamada Teresa Pepe, fue brutalmente asesinada en su hogar del partido de Quilmes. Las autoridades detuvieron a Yonatan Molina, un vecino de la víctima de 21 años y con antecedentes penales, como el principal sospechoso del crimen.
El macabro descubrimiento tuvo lugar en la vivienda de Teresa, ubicada en Intendente Olivieri al 3.600. Uno de los hijos de la mujer encontró su cuerpo horas después del incidente, al no recibir respuesta de su madre. El cuerpo de Teresa Pepe presentaba al menos cuatro puñaladas en el cuello.
El padre de Yonatan Molina fue quien denunció a su hijo a la Policía, colaborando con la búsqueda y detención. Las autoridades sostienen que el crimen podría haber sido motivado por un intento de robo, ya que se sospecha que el detenido ingresó a la casa de la víctima con esa intención antes de cometer el asesinato.
La fiscal Ximena Santoro, de la Unidad Funcional de Instrucción N°7 de Quilmes, está a cargo de la investigación y aguarda los resultados de la autopsia para recabar más información sobre las circunstancias del homicidio.
Una testigo clave en el caso resultó ser la tía del presunto asesino, quien informó haber visto a Yonatan alrededor de las 16:30, momento en el que aparentemente saltó la medianera de la vivienda de la víctima. La testigo relató que el acusado llevaba consigo dos televisores LED y una bolsa con carne que ocultó bajo una escalera.
Los investigadores encontraron restos de sangre en las zapatillas de Molina. Según el padre del detenido, su hijo estaba atravesando problemas de consumo y se había mudado de la casa familiar para vivir en un asentamiento en Villa Itatí, a unas diez cuadras de la escena del crimen.
