La Fiscalía de Homicidios solicitó una pena de 15 años para Diego Federico Santoni Sánchez, conocido como “Bebe” por un asesinato ocurrido en un “aguantadero” de Guaymallén, en abril de 2022.
Esta mañana, el fiscal Gustavo Pirrello realizó su alegato de acusación y solicitó que se condene a Santoni por el delito de homicidio simple agravado por la participación de un menor de edad, afirmando que el imputado le dio muerte a Eduardo “Capicúa” Ibáñez (44), quien fue apuñalado repetidas veces.
Por su parte, la defensa sostuvo que se trató de un caso de legítima defensa o, eventualmente, la pena mínima para el delito de homicidio en exceso de legítima defensa.
El miércoles, el imputado tendrá derecho a expresar su última palabra y luego la jueza Carmen Magro, estará en condiciones de dictar sentencia.
Asesinato en un “aguantadero”
El 16 de abril de 2022 en una casa ubicada en Santa María de Oro 728 de Guaymallén. Ibáñez fue hallado sin vida en el patio de su casa tras recibir gran cantidad de puñaladas en distintas partes de cuerpo.
El cadáver fue encontrado por una joven de 23 años que había pasado a saludar a Ibáñez y se topó con una escena por demás violenta: la víctima estaba tendida en el suelo boca arriba, vestida y con la cara bañada en sangre, a tal punto que no se podía visualizar sus facciones.
La joven, conocida como “Yeni”, salió corriendo a la casa de un vecino de la víctima en busca de ayuda. El hombre llamó al 911 y cuando llegaron los médicos del Servicio de Emergencias Coordinado confirmaron que había sido un asesinato.
A partir de ese momento comenzó una ardua tarea de investigación, que comenzó por entrevistar a los vecinos, quienes describieron la casa del fallecido como un “aguantadero” en el que se reunían distintas personas para consumir alcohol y estupefacientes.
En un primer momento, el fiscal Pirrello ordenó la detención de “Yeni” debido a que fue señalada por varios vecinos como una conocida de la víctima que frecuentaba el lugar. Sin embargo, tras permanecer 48 horas aprehendida fue liberada porque, gracias a otros testimonios, se pudo reconstruir que ella fue quien encontró el cuerpo y que en las horas previas estaba en otro lugar.
El 10 de mayo de 2022 personal de la División Homicidios montó una vigilancia sobre una vivienda ubicada a la 400 de la calle O’Brien de Guaymallén, con el dato de que Diego Federico Santoni Sánchez podría haber dormido en esa casa.
Luego, los policías vieron salir a un perro y a una persona que intentó que el animal entrara de nuevo. Los investigadores constataron que era la persona buscada. El hombre los observó e ingresó nuevamente a la casa. Los uniformados entraron al domicilio y detuvieron al buscado en la cochera.
