El talentoso tenista escocés, Andy Murray, puso fin a su brillante carrera profesional este martes, con un emotivo mensaje en sus redes sociales. Tras años luchando contra diversas lesiones, el tres veces campeón de Grand Slam decidió colgar la raqueta una vez que finalice su participación en los Juegos Olímpicos de París 2024.
“Llegué a París para mi último torneo de tenis. Competir por el equipo de Gran Bretaña ha sido, sin duda, la semana más memorable de mi carrera y estoy muy orgulloso de poder hacerlo una última vez”, escribió Murray en su cuenta de Instagram, donde compartió la noticia con sus seguidores y el mundo del deporte.
Murray tiene 37 años y ya había dado indicios de un posible retiro hace algunos meses, tras ser intervenido quirúrgicamente por un quiste espinal, lo que le impidió participar en el torneo de Wimbledon. Este procedimiento se sumó a una serie de lesiones previas que incluyeron la colocación de una prótesis en la cadera en 2019, las cuales lo alejaron progresivamente del circuito.
A pesar de las dificultades físicas, Murray siempre demostró una gran determinación y amor por el tenis. En París 2024, buscará un broche de oro a su carrera, compitiendo tanto en el cuadro individual como en dobles junto a su compatriota Dan Evans. La dupla fue confirmada hace unas semanas como una de las que representará a Gran Bretaña junto a la que forman Joe Salisbury y Neil Skupski y la de Katie Boulter y Heather Watson.
Los Juegos Olímpicos tienen un significado especial para Murray, ya que es el único hombre en ganar dos medallas doradas individuales en esta competencia. Las preseas las consiguió en Londres 2012, tras vencer en la final al suizo Roger Federer, y en Río de Janeiro 2016, al superar al argentino Juan Martín Del Potro.
LOS TÍTULOS DE MURRAY
Andy Murray deja atrás un legado inigualable en el mundo del tenis. Con tres títulos de Grand Slam (US Open 2012, Wimbledon 2016 y US Open 2016), dos medallas de oro olímpicas (Londres 2012 y Río de Janeiro 2016) y un puesto número 1 del ranking ATP, Murray se logró consolidar como los mejores dentro de una generación que dominaron Roger Federer, Rafael Nadal y Novak Djokovic.