El crimen del ex futbolista Diego Mosca (42), durante un asalto en Ciudad, parece tener un rápido camino al esclarecimiento. Con las mismas pruebas contundentes que se ordenó la detención del sospechoso, ayer se le dictó la prisión preventiva.
Desde que se pidió su captura, la situación de Roberto Cataldo (42) en la causa es muy complicada. Una serie de elementos casi irrefutables lo llevaron a quedar como acusado y posteriormente detenido, a tres días del asesinato. Tan difícil de remontar es su futuro en el expediente, que su abogado no presentó objeciones ni solicitó beneficios en la audiencia de este martes.
La fiscal Andrea Lazo enumeró los indicios que lo ponen en la mira del hecho y pidió que permanezca en la cárcel hasta el juicio. La representante del Ministerio Público Fiscal repasó la declaración de tres testigos presenciales que describen al agresor con tatuajes y características físicas similares a las de Cataldo; recordó que cuentan con las imágenes de las cámaras de seguridad que refuerzan estas coincidencias y, por último, mostró los cotejos de ADN que dieron positivo entre el imputado y dos elementos hallados en la escena: un barbijo y una gorra.
Ante esta evidencia y sin resistencia de la defensa, la jueza Mirna Montaldi avaló el pedido de la fiscalía y ordenó la prisión preventiva en el penal, con la imputación de homicidio criminis causa en concurso real con tentativa de robo agravado por el uso de arma de fuego. Este delito contempla la pena única de prisión perpetua, en un futuro juicio por jurado.
Asalto a la salida del casino
Los pesquisas tienen tan encaminada la investigación que ya establecieron todo el accionar de los protagonistas en la noche del 22 de noviembre pasado. Diego Mosca salió en la tarde de aquel domingo de su casa de Luján, con dirección al casino de Mendoza. Estuvo allí jugando con un amigo hasta las 22, cuando decidió emprender el regreso.
Quince minutos después, mientras esperaba el micro en Rioja y Brasil de Capital, un delincuente lo abordó con una pistola 9 milímetros. La víctima se resistió al robo y forcejeó con el ladrón, quien lo baleó dos veces en el tórax sin sacarle nada. El asaltante escapó por la Costanera hacia Dorrego, en tanto que el herido fue llevado al hospital Central, donde perdió la vida la madrugada del día siguiente.
La muerte de Mosca causó tristeza en el ambiente del fútbol mendocino, ya que en su carrera como jugador había pasado por clubes como Gimnasia, Maipú y Palmira, entre otros.
