A un año de la desaparición del jubilado Humberto Daniel Rodríguez, visto por última vez el 11 de enero de 2023 en El Nihuil, San Rafael, su familia no pierde la esperanza de encontrarlo con vida, al tiempo que critica la actuación judicial y pide que el Ministerio de Seguridad ofrezca una recompensa.
Rodríguez fue visto por última vez por uno de sus hijos en su casa y todos pensaron que se había marchado a Luján a ver a su hermano, como habitualmente hacía. Pero a los pocos días descubrieron que no había viajado. Desde ese momento y hasta ahora siguen buscándolo.
Lo mismo ha hecho la Justicia: desde que se puso la denuncia se han realizado varios operativos de rastreo por el pueblo de El Nihuil y por las márgenes y el interior del dique. Todos, hasta ahora, con resultado negativo.
“Al cumplirse un año, seguimos sin novedades. No vamos a dejar que quede en el olvido, su familia lo espera y lo va a seguir buscando. Ayúdenos a compartir y llegar a más personas. Gracias”, se puede leer en un posteo reciente subido a la página de Facebook “Búsqueda de Humberto Daniel Rodríguez”.
“En este aniversario estamos bastante angustiados pero unidos y con mucha fe en poder encontrarlo”, dijo a Los Andes Lorena, una de las hijas de Humberto.
“Nosotros somos cuatro varones y dos mujeres y estamos en permanente contacto. Esto es algo de todos los días, hablamos entre nosotros y con nuestros cuñados. Los nietos lo extrañan y se les llenan los ojos de lágrimas porque quieren ver a su abuelo”, agregó.
En cuanto a la investigación, Lorena explicó que desde el Ministerio de Seguridad les prometieron que iban a dar una recompensa (“como han hecho con otros casos similares”) pero finalmente la idea no ha prosperado. “Nosotros seguimos pidiéndola a través de nuestro abogado”, completó la angustiada mujer.
“Ahora pedimos el cambio de fiscal y que se siga moviendo la causa, que no quede paralizada, que se profundice la investigación. La fe nuestra es encontraron en cualquier lado, perdido. Las pruebas indican que no ha salido de El Nihuil”, agregó Lorena Rodríguez.
Rastrillajes sin resultados
La desaparición de Rodríguez guarda una extraña relación temporal y espacial con otro caso policial muy recordado en Mendoza: la desaparición del joven Oscar Garavaglia (17), quien fue visto por última vez también en El Nihuil hace 45 años: el 12 de enero de 1979.
El 20 de enero de 2023, luego de que se realizara la denuncia, el Ministerio Público Fiscal de Mendoza solicitó la difusión de la foto de Rodríguez.
La familia creía que se había ido desde el Sur hacia Luján de Cuyo, donde viven sus hermanos, pero al descubrir que no había hecho ese viaje, decidieron denunciar su desaparición. Según datos aportados, Rodríguez mide 1.80 aproximadamente, es canoso, de contextura robusta y de tez blanca.
Según sus allegados, es un jubilado inquieto, que siempre estaba generando alguna actividad para hacer. El día de su desaparición le estaba arreglando el techo a la mamá de sus nietos, en la tarde se fue al centro a cobrar su jubilación y pasó la noche en el casino.
Al analizar las cámaras de seguridad de la ciudad sureña, la Policía descubrió que Rodríguez salió a las 4.30 de la casa de juegos ubicada en la calle Yrigoyen y tomó el micro de regreso a El Nihuil.
El 14 de diciembre pasado el Ministerio Público Fiscal ordenó otro operativo con el apoyo de drones y perros entrenados. Hubo recorridas en inmediaciones del lago y algunos puestos que solía frecuentar Rodríguez.
Por esa fecha la familia de Rodríguez cambió de abogado y como querellante quedó Juan Coria. Desde junio, la investigación tiene un sospechoso: Darío Aranguren, un vecino de la zona cuya casa fue allanada en julio pasado. En ese momento se le secuestró el teléfono pero su contenido todavía es analizado por delitos informáticos.
Para el abogado, todo hace pensar que el jubilado no salió del distrito El Nihuil. Se han pedido informes de movimientos bancarios, otros a la Comisión Nacional de Transporte, a las empresas de transporte público de la zona, y todos han dado resultado negativo.
También descartan otras hipótesis, como un suicidio o que el hombre tuviera algún problema con vecinos. Más allá de los informes y rastrillajes, el movimiento de la causa ha sido escaso, por eso se han pedido nuevos operativos.