La investigación del brutal femicidio de Florencia Romano (14), ocurrido hace exactos dos meses en una vivienda en Maipú, tuvo hoy el pedido de elevación a juicio con un cúmulo de pruebas que complican al único imputado por el hecho, Pablo Arancibia.
Como había adelantado Los Andes, se esperaba que al término de la feria judicial y durante la primera quincena de este mes hubiera novedades respecto de la elevación a juicio.
Esta mañana la fiscal de Homicidios Claudia Ríos Ortiz le comunicó a la defensa del acusado y a la querella -la familia de la niña es representada legalmente por Cristian Vaira Leyton y Agustín Magdalena- sobre la medida.
El defensor oficial Rafael Manzur podrá oponerse al pedido de elevación y luego incluso apelar ante la ratificación de un juez pero, de no mediar rechazos, la causa llegará a manos de un jurado popular, que deberá definir el destino de Arancibia, quien está acorralado por una serie de pruebas contundentes. El delito de homicidio agravado por femicidio por el que se realizó el pedido de elevación a juicio tiene pena única de prisión perpetua.
El hombre de 33 años se encuentra con prisión preventiva desde el 29 de diciembre pasado.