¿Propinas sugeridas en la cuenta? A partir de un proyecto de ley presentado en la legislatura provincial, quienes acudan a un local gastronómico se encontrarán -en caso de que se convierta en ley- con una leyenda en la factura final donde se mencionará que se sugiere dejar el 10% del total de la consumición por la atención.
A partir de esta novedad, se generó debate entre los empresarios gastronómicos, los mozos y los clientes. Estos últimos hasta el momento no están obligados a dejar un monto específico sino que surge de la voluntad de cada uno.
Otro punto interesante de esta iniciativa -presentada por el diputado del Frente Renovador Guillermo Pereyra (ex Secretario General del CEC)- es que lo recibido por quienes realizan la atención a los clientes no podrá ser descontado de su remuneración ni de los adicionales que perciba según su convenio colectivo.
Esta presentación se da en el marco de un debate en Estados Unidos, que propone quitar las propinas a cambio de subir el salario mínimo (elevándolo de 10 a 15 dólares) e igualarlo con el de otras actividades. Otro caso es el de Chile, donde si bien suele figurar el 10% como monto de propina, no es obligatorio y queda a consideración del cliente.
El plan de este proyecto es que "si bien el artículo 113 de la ley de Contratos de Trabajo tiene incorporada la propina (...) esta ley (...) facilitaría al consumidor su cálculo y ayudaría a incentivar al trabajador que se esmeraría en su atención para la propina."
Desde la Federación Empresaria Mendocina (FEM) indicaron que les genera una preocupación esta iniciativa de ley y que no tuvieron contacto con el autor del proyecto. Además, advirtieron que ya existe un ítem del sueldo de los mozos que corresponde a la propina.
"Esa discusión ya se dio una vez en Mendoza y fue resuelta en 1982, cuando el sindicato y la federación llegaron a un acuerdo. Allí se determinó que al salario se le agregaría un complemento de servicio de 12% del básico. Es un tema de muchos años que ya fue resuelto", indicó Fernando Barbera, presidente de la Asociación Empresaria, Hotelero, Gastronómica y Afines de Mendoza (AEHGA) y miembro de la FEM.
Barbera aclaró que este convenio comprende a todo el personal dedicado a la gastronomía, y también a quienes se desempeñan en el rubro hotelero. Por eso, para él la propina debe surgir de la voluntad del cliente, y si bien está de acuerdo con el concepto de que la propina se sugiera explícitamente, considera al mismo tiempo que debe quedar a criterio del cliente cuánto es lo que debe dejarse.
"La propina responde a una tradición en el país. Y debe seguir siendo voluntaria porque si el cliente se sintió bien atendido, comió bien o el recepcionista tuvo un buen trato, sabemos que va a dejar propina, naturalmente. Es como un premio", resaltó.
Por otro lado, el empresario gastronómico dice que añadir este ítem traerá aparejado discusiones salariales y problemas impositivos. “Sirve para que el cliente visibilice cuando es lo que puede dejar, pero para nada más. Si lo ponemos allí puede haber problemas”, indicó.
Para Barbera, lo mejor es dejarlo librado a la libertad de cada empresa. "También se puede señalar en el menú que la propina no está incluida o que cada lugar disponga de un porcentaje sugerido", deslizó.
Por su parte, Humberto Montivero, secretario general de Gastronómicos en Mendoza, advirtió que no debe considerárselo como algo obligatorio sino solamente como una sugerencia, que el cliente aceptará o no.
"Creo que en la parte gastronómica hay que ganarse la propina, porque nadie te regala nada. Ayuda a dejar claro cuánto es lo que se puede dejar, pero también hay que ver dónde trabaja cada uno. Nosotros ya tenemos nuestro básico y los adicionales de propina", indicó el sindicalista.
Los que están de acuerdo
Consultados al respecto mozos y algunos empresarios gastronómicos indicaron que la propuesta no les parece desubicada, teniendo en cuenta que hay comercios en los que los clientes no valoran el esfuerzo de quienes los atienden.
"Me parece buena iniciativa, porque la gente que consume a veces no tiene conciencia del esfuerzo que estás haciendo, que vas y volvés muchas veces, y que le ponés dedicación. Y aunque tenemos claro que la propina no es obligatoria, a veces resulta poco lo que dejan para lo que consumieron", indicó Lucía, que trabaja en un restó bar de Luján, y quien agregó que a veces llega a ganar el triple del sueldo de una noche con la propina.
Roberto Blanco, quien tiene un emprendimiento en el microcentro mendocino, explicó que no alcanza a ver en qué afectaría al comerciante. "Me parece fantástico que se coloque una propina sugerida. Por ejemplo en mi negocio los chicos atienden en un patio de comidas, y muchas veces la propina queda en el plato y la agarra cualquiera. Del 100% de lo que te dejan, a mis mozos les llega 30%", explicó.
Luego señaló que le aliviaría que sus mozos tuvieran propina sugerida en el ticket aunque coincide en que no debe ser obligatoria. "Está bueno que se pueda cobrar la propina con la tarjeta o en mano en el momento", contó.
Lucas Brajón, propietario de Super Hot, dijo que la propuesta le parece buena, porque a veces la despreocupación por la persona que está atendiendo es grande. "Tenemos un cartel que dice que si hubo buena atención es bueno dejar propina. También es una forma de exigencia del mozo. Es un reconocimiento, un ida y vuelta. Creo que ayudará mucho", destacó.
No sólo para los mozos
El proyecto presentado en la legislatura contempla además que los ingresos percibidos como consecuencia de esta ley se repartan en partes iguales, entre los mozos y todo el personal de cocina.
También incluye la posibilidad de que el consumidor pueda solicitar al encargado del establecimiento que se elimine la propina de la factura cuando el servicio fue prestado de modo insatisfactorio o deficiente. La queja se asentará en el libro de quejas del establecimiento.
En otros países
El sitio especializado en viajes GoCompare realizó un estudio que destaca cuándo y cuánto es necesario dejar propinas en restaurantes.
Por ejemplo en Brasil, en restaurantes la factura suele incluir un 10% por el servicio en la mayoría de los locales. También puede dejarse una propina de entre 10% y 15%. En tanto en Cuba se suele dejar del 10 al 15% de la cuenta.
En México se acostumbra dejar el 15% adicional para la propina en el caso de bebidas y comida sin tener en cuenta el IVA de la factura. Pero en un bar se dejan unos 20 pesos mexicanos (30 pesos argentinos) por cada ronda de tragos.