Las conocidas torres de San Juan y República de Siria no muestran por estos días su mejor cara. El patio interno donde solían jugar una decena de chicos se encuentra vallado y en la reja de las cocheras dos carteles anuncian que están clausuradas.
Es que el viernes pasado la Municipalidad de Capital decidió impedir la presencia de personas y vehículos en estas dos áreas por problemas estructurales: una losa del estacionamiento cedió y generó el quiebre en el baldosón del patio.
El inconveniente edilicio está atravesado por un conflicto judicial y por versiones cruzadas. Por un lado, un hombre que asegura ser el administrador general de las torres dice que el tema se generó porque tanto los propietarios como los que alquilan no pagan las expensas.
Por el otro: vecinos, la unión vecinal y quienes se reconocen a sí mismos como administradores por torre, desconocen la autoridad del supuesto administrador general y buscan una posible solución.
Joaquín Passolas es el administrador de la torre B1 y asegura haber tenido distintos conflictos con quien para él es el administrador de las cocheras, pero que se denomina administrador general.
"Tiempo atrás hicieron una denuncia judicial por "daño temido" alegando que toda la estructura estaba a punto de colapsar", contó. En ese entonces intervinieron jueces y peritos: "Todos dijeron que las torres estaban bien pero que había que hacer algunas obras para mejorarlas", recordó a la vez que remarcó que los principales arreglos que tenían que hacer era en las cocheras.
Como las reformas no se hicieron y la municipalidad clausuró este espacio, el grupo comenzó a trabajar para buscar una solución. "Nos juntamos con los vecinos para ver qué podemos hacer porque la idea es arreglarlo lo antes posible", aseguró Joaquín Passolas.
Lo primero que hay que determinar es el presupuesto que se necesitará ya que han circulado versiones de distintos montos. "Por un lado nos han dicho que con 50.000 pesos se arregla pero también que vamos a necesitar dos millones por lo que en la próxima reunión cada uno tiene que traer un presupuesto", comentó el responsable.
Una alternativa que evalúan, si es que el costo de las obras es muy elevado, es que la municipalidad los ayude en la financiación. "Nos dijeron que si la obra tiene un costo muy grande nos puede dar el financiamiento. Obviamente no nos regala nada. Después se cobraría con alumbrado, barrido y limpieza", explicó Passolas.
Pero para poder solucionar este inconveniente es fundamental contar con el apoyo de las más de 3.000 personas que allí viven. "Tenemos una unión vecinal y la idea es que se asocien todos para poder estar de acuerdo", destacó Margarita Fuentes de la torre B 3 y miembro de la Unión Vecinal.
"Va a hacer falta que paguemos entre todos, pero hay mucha gente reacia por lo que tenemos una tarea difícil", añadió Passolas para quien el problema podría estar solucionado en dos meses.
Aldo Porcario se autodenomina administrador del complejo. "Fui elegido en una asamblea que se realizó en abril de 2013 en la que recibimos 370 votos, que no alcanzaron a la mitad más uno que exige el reglamento pero, debido a la urgencia, se presentó el caso a la jueza Graciela Simón, del Primer Tribunal de Gestión Judicial Asociada y ella avaló nuestra elección", destacó.
"La gente no quiere pagar las expensas por eso han cerrado las cocheras. Desde octubre decíamos que iba a pasar esto por lo que se dispuso una expensa extraordinaria pero no la pagó nadie", relató. Según narró Porcario él también se ha reunido con la municipalidad. "Estamos trabajando para hacer un arreglo provisorio, ya que no contamos con dinero", apuntó.
Para él no es correcto que una unión vecinal se encargue de solucionar este conflicto. "Primero, porque no corresponde porque se trata de propiedad horizontal; segundo, que una unión vecinal no es la adecuada para manejar este tipo de asuntos", señaló.
Algunos vecinos que no reconocen a Porcario -y prefirieron no dar sus nombres- aseguran que el hombre tiene intereses inmobiliarios en la zona por lo que busca desprestigiar a las torres y que la gente tenga que vender sus departamentos a un precio muy bajo.
"Siempre buscan generar miedo para que la gente salga a regalarlo", deslizaron.Consultado al respecto el hombre respondió: "Es una payasada. Yo soy un trabajador más que no podría comprar departamentos en las torres. Además, hace diez años que ya vienen desvalorizados", expuso.
El secretario de Infraestructura de la Capital, Raúl Cicero, recordó que se decidió clausurar las cocheras de las torres de San Juan y Siria porque había peligro de derrumbe de las losas. "Había riesgo para las personas y para las vidas por lo que tuvimos que tomar la decisión en 24 horas", recordó.
Con respecto a los arreglos para que se vuelva a habilitar, estima que tienen un valor de entre 300 mil y 400 mil pesos. "Por estos días el caso está en manos del área de Obras Privadas de la municipalidad quienes se están poniendo en contacto con los profesionales idóneos", comentó.
El intendente capitalino, Rodolfo Suárez, remarcó el lunes: "Las torres no corren ningún peligro de derrumbe. Los inconvenientes se dan sólo en la zona de cocheras. Hasta que el consorcio no haga las obras, las cocheras no se van a habilitar".
Sin cochera
Angelina Ortega es una de las vecinas de las torres afectada por el cierre de las cocheras. "Guardaba una moto y un auto y tuve que salir a buscar urgente una alternativa", comentó. Lo peor para ella es que antes de conocer la clausura abonó todo el mes de abril en las torres, por lo que tuvo que pagar doble.
"Si ya conocían de antemano la situación deberían haber avisado antes", reclamó. Si bien la clausura se produjo el viernes, las personas tuvieron tiempo hasta el lunes para sacar sus autos. En custodia del estacionamiento quedó el empleado Mauricio Zabala. Comentó que se devolverá el dinero a todos los que abonaron abril.
