El defensor brasileño Thiago Silva viene de mal en peor en la consideración general. Si bien sus condiciones como futbolista son destacadas, lo cierto es que màs de una vez pierde el control sobre sí y comete actos de imprudencia dentro de una cancha que reciben las sanciones correspondientes.
Ahora, el zaguero de la "verde amarela" volvió a cometer un penal tras tocar con la mano una pelota lanzada en forma de centro en el juego de ayer contra Paraguay, por los cuartos de final de la Copa América.
En Brasil, el futbolista ya era objetado por no haber querido patear un penal en la definición de octavos de final contra Chile, en el pasado Mundial 2014. Ahora, vuelve a estar en el centro de la escena.
El marcador central había hecho lo mismo en el partido en que su equipo, PSG, jugaba contra Chelsea en los cuartos de la pasada Champions League.
Según publica hoy el sitio lancenet.br , la explicación de Thiago Silva fue la siguiente: "Contra Chelsea yo subí menos y tuve menos impulso. Creo que deberé reveer cómo hago la impulsión. Sin usar los brazos es difícil subir más".
Además, señaló: "No recuerdo haber tocado la pelota con la mano. El árbitro me dijo que había visto una mano, pero no me acuerdo".
Mirá los dos videos.
