La ciclovía de Godoy Cruz es un espacio en el que, a diario, conviven en simultáneo miles de ciclistas con peatones y otros paseantes. Incluso, en algunos tramos cuenta hasta con doble carril: uno para quienes se movilizan en bicicletas y otro para quienes lo hacen caminando; ambos ubicados en el centro del concurrido espacio verde.
Entre tantos transeúntes es muy común encontrarse periódicamente -y cada vez más seguido- algunos intercambios de palabras, insultos y hasta mínimos accidentes (generalmente no son de consideración). En las últimas dos semanas, a lo largo del circuito godoicruceño se registraron al menos 5 accidentes (contabilizados por los vecinos del lugar); uno de los cuales tuvo lugar sobre calle Moreno, en el límite entre ese departamento y Ciudad. En tanto, ayer por la mañana y casi a la misma hora hubo dos episodios similares.
En estos 5 episodios -al igual que en la mayoría de los casos más frecuentes-, los siniestros estuvieron dados por la falta de consideración, ya sea de algunos conductores (afortunadamente, los menos) que no respetan los reductores de velocidad y hasta pasan por alto los carteles de Pare y que indican la prioridad para los ciclistas. O bien por la de los ciclistas que, arrogándose de tener la prioridad, ni siquiera intentan disminuir la velocidad del pedaleo y cruzan desafiantes.
Según manifestaron vecinos y usuarios de esta vía, la mayoría de los accidentes ocurren en aquellas calles cuyo cruce no se encuentra a desnivel. No obstante, y más allá de la seguidilla de los últimos días, coinciden en que "son los menos" los conductores desconsiderados.
Desde la dirección de Tránsito de la Municipalidad de Godoy Cruz, en tanto sostuvieron que en los próximos días tendrán información y estadísticas detallada sobre los siniestros (desde febrero están tomando intervención en accidentes con lesiones también). Y optaron por no hacer un balance en base a "apreciaciones a simple vista".
"La ciclovía que va de sur a norte y de norte a sur es muy transitada, y hay varios asuntos complicados. Es fundamental que ciclistas y automovilistas circulen con precaución en todos los cruces; sobre todos en algunos como Benegas, Anzorena y Chacabuco, que generalmente son muy transitados por autos", destacó el director de Tránsito de la comuna, Lisandro Delgado.
El primera persona
El sábado último, una joven madre mendocina y su hija de 10 años circulaban por la ciclovía de Ciudad (en calle Moreno), casi a la altura del límite con Godoy Cruz cuando fueron víctimas de un taxista que embistió a la niña.
"Vivimos cerca del Parque San Vicente (Godoy Cruz) y estábamos volviendo del parque. Al llegar a la esquina con Rodríguez, mi hija cruzó con el semáforo todavía en verde; aunque a la mitad cambió. Había dos autos -uno al lado del otro-, que frenaron. Pero un taxi que venía más atrás cruzó. Por suerte mi hija llegó a frenar y el vehículo chocó en la rueda delantera y la nena sólo se hizo unos raspones en la rodilla. El tema es que el taxista nunca se bajó a ver cómo estaba mi hija y sólo se dedicó a insultarme", recapituló la mujer; quien destacó que el taxista (conductor profesional) ni siquiera se fijó en que los dos autos que estaban a su lado habían frenado pese al cambio del semáforo para darle paso a la nena que había empezado a cruzar con la luz verde. "Afortunadamente no fue más que un susto. El tema es que no es algo aislado. Cerca del Parque San Vicente y en la zona donde están los reductores y los cruces en altura hay más respeto y los autos frenan, pero viniendo para el norte se va respetando cada vez menos. A veces hasta ves que los autos frenan de golpe y hay hasta bocinazos e insultos para los ciclistas", indicó la mujer.
Durante la mañana de ayer, entre las 8:30 y las 9 se registraron dos accidentes en los cruces de la ciclovía con Chacabuco (el primero) y con Anzorena (el segundo). "La semana pasada también hubo otros dos en los cruces con Maipú y también con Chacabuco. Da la sensación de que los autos casi ni frenan o no respetan los carteles. Y de que los ciclistas se creen impunes por tener prioridad", destacó Laura, vecina de Villa Marini.
“La principal recomendación tanto para ciclistas como para conductores es que circulen con consideración y precaución. Muchas veces los ciclistas tienen prioridad de paso y otras no, es clave estar muy atentos. Más allá de que aún no tenemos estadísticas concretas, la realidad es que la ciclovía se usa muchísimo a toda hora”, sintetizó el director de tránsito.
Adaptación
Por su parte, Lucas Germán Burgos -uno de los miembros fundadores del grupo Pro Bici- destacó que de a poco los ciclistas y conductores se han ido adaptando a la red de ciclovías de Godoy Cruz, una de las más antiguas del Gran Mendoza.
“La ciclovía de Godoy Cruz propició una red bastante rápida que vino a democratizar la calle para todos. Y que generó una adaptación que se mantiene hasta hoy, y que sirve y funciona para lo que los ciclistas urbanos veníamos proponiendo. A diferencia de otras ciclovías -como la de Ciudad- aquí no se ve una delimitación mínima entre las bicicletas y los autos; y generalmente los vehículos que van a cruzar frenan para dar paso a las bicis. Y las bicis frenan por las dudas, así como también dan paso a los peatones. Tiene que ver con una cuestión de pensar en el más vulnerable”, indicó Burgos.
Según el activista, incluso en los casos en que los conductores no frenan al cruzar hay una cuota de inexperiencia en el tema. "Somos muy nuevos en esto. Pero, así y todo, en la ciclovía de Godoy Cruz es donde más se ha hecho la adaptación con los años. Es importante que se continúe con la ejecución del Master Plan de ciclovías en el Gran Mendoza, para llevar espacios de calidad a todos los departamentos", sintetizó.
