Contemplar el atardecer con la arena en los pies, sentir de cerca las olas, disfrutar del teatro, pasear y presenciar shows en vivo, es una vez más el plan elegido de miles de mendocinos que armaron su equipaje y viajaron rumbo a Mar del Plata. De hecho, desde principios de enero, las playas de esta concurrida zona de la Costa Atlántica se poblaron de turistas que llegaron desde todos los rincones del país. Entre ellos, el acento 'menduco' marca presencia.
De cara a febrero, en los inicios de la tercera etapa de recambio turístico, todo indica que tanto las reservas como la ocupación de habitaciones en los hoteles, casas y departamentos continuarán siendo elevadas. Del mismo modo, los precios, en muchos casos, se mantendrán y en otros serán algo más económicos que los de enero, según el tipo de alojamiento, categoría y ubicación dentro de esta gran ciudad costera que ha vivido un enero (como todo el país) "al rojo vivo" en materia de temperaturas.
Según los datos de la Secretaría de Turismo de la Provincia de Buenos Aires, en lo que va del mes pisaron tierra marplatense unas 900 mil personas que llegaron principalmente de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe y Salta.
A los contingentes también se sumaron los mendocinos, que de acuerdo a las estimaciones del rubro inmobiliario este año fueron más. Para el secretario de Turismo bonaerense, Ignacio Crotto, uno de los aspectos que contribuye al boom de veraneantes es que justamente la oferta en La Feliz no se agota en disfrutar de la playa.
Asistir a una obra de teatro, observar un show de tango, degustar pescados y mariscos, recorrer las plazas y museos o simplemente pasear por las calles y comprar obsequios, son los planes que casi nadie se quiere perder. En los paradores y en los restaurantes, las ofertas propician las ventas: "pizza + cerveza $ 50", promociona un local de comidas rápidas en pleno centro marplatense, mientras que los negocios de ropa, librerías y venta de alfajores tradicionales -entre otros- aparecen repletos de personas durante casi todo el día.
Los Andes recorrió la ciudad consultando precios y servicios para brindar una guía para los mendocinos que deseen viajar a Mar del Plata en febrero.
Aquellos que elijan descansar muy cerca de estas aguas tendrán un abanico de opciones. En lo que a precios de alojamiento se refiere, las parejas, familias y grupos de amigos encontrarán tarifas para todos los bolsillos.
Alojamiento. En los hoteles y apart hoteles, como así también los propietarios de inmuebles ubicados en zonas cercanas a la playa, aseguran que el mes entrante los precios serán los mismos que los de enero o, en su defecto, registrarán leves descuentos. Por otro lado, por estos días el porcentaje de ocupación ronda el 90%, según los datos oficiales. Así, todo muestra que la demanda en este rubro sigue siendo muy alta e incluso muchos propietarios de casas y departamentos tienen colmadas las reservas hasta fines de la primera quincena de febrero inclusive.
Para quedarse en un hotel de dos estrellas ubicado en el corazón de Mar del Plata, a pocas cuadras del casino y la playa Bristol, es necesario tener como mínimo $ 250 por noche por persona. De allí en más, los precios llegan a los $ 1.300 por día por persona en los hoteles de mayor categoría. "Estimamos que en febrero las tarifas no variarán", comentó una recepcionista del Hotel Antártida, donde el costo más económico es de $ 253 por persona e incluye una noche y desayuno.
En muchos casos, la financiación con tarjeta de crédito es una opción que hace más accesible vacacionar. De hecho, las promociones para fomentar el consumo financiado en cuotas aparecen publicadas en las páginas web de las distintas empresas del rubro.
Al igual que los hoteles, los departamentos también presentan precios variados. Lo cierto es que quedarse cerca de zonas como Playa Grande o Punta Mogotes sale más caro que vacacionar en las cercanías del casco histórico o la Bristol.
Para una pareja que desee permanecer a tres cuadras de la playa, en las cercanías de calle Alem -una de las más concurridas en la noche marplatense- alquilar un departamento puede costar unos $ 1.000 el día. "Por ahora tenemos todo ocupado hasta el 20 de febrero", comentó Gabriel Sánchez, propietario de un inmueble, y aseguró que este año se notó mucha demanda por parte de mendocinos.
Si la idea es quedarse una semana, alquilar un departamento con una habitación, cama para dos y cocina a estrenar vale $ 3.500 en Punta Mogotes, a 15 cuadras del faro. "Los últimos clientes que tuvimos fue una pareja que llegó desde Godoy Cruz", comentó la propietaria.
Clara María Falliara cuenta con 14 departamentos y casas en diferentes zonas de la costa marplatense. Desde su punto de vista, este verano los mendocinos no han sido mayoría entre los viajeros.
En general, el promedio de estadía varía entre 5 y 7 días. "Los precios seguirán igual", aseguró y detalló que alquilar una casa a sólo unas cuadras de Playa Grande, Playa Chica y Playa Varese puede costar unos $ 250 por día por persona. Si la idea es bajar aún más los costos, hay que decir que estos se vuelven más accesibles en el caso de los grupos de amigos que deciden compartir al alquiler. Incluso, algunos propietarios alquilan sus inmuebles para que se queden más de diez personas.
Para los amantes del confort, los apart hoteles se perfilan como la propuesta más adecuada, puesto que en ellos los pasajeros cuentan con otros servicios e infraestructura. Un departamento de esta clase ubicado en las playas del sur, donde es posible utilizar los servicios de los balnearios ubicados en la costa, ronda los $ 790 la noche para dos personas con desayuno y $ 1.200 para cuatro personas con los mismos servicios incluidos, indicaron desde el Apart Hotel Family.
Gastronomía. Al caer la noche, la ciudad se llena de luces y los veraneantes abandonan las reposeras y las mallas para salir en busca de un apetitoso convite. Es el momento en que muchos aprovechan, por ejemplo, para cenar con el océano como fondo y degustar las recetas con frutos del mar. Darse este gusto puede costar unos $ 150 por persona, incluyendo bebida y postre.
De hecho, un plato de langostinos a la crema o un abundante bife de salmón rosado cuesta alrededor de $ 75 la porción, en plena playa marplatense. Si la idea es compartir una parrillada entre tres, el costo será de unos $ 250, mientras que el precio de los vinos varía entre $ 50 y $ 150. Para aquellos que eligen comidas más bien rápidas y simples, los precios son aún más accesibles; de hecho, un plato de milanesa con papas fritas cuesta $ 50, casi lo mismo que una pizza de ocho porciones.
Por la mañana, sentarse a desayunar un café con medialunas vale $ 25, mientras que un licuado de frutas con leche grande sale $ 35.
Estacionamiento y carpas. Pasando el Faro, siguiendo por la ruta que llega a las playas sureñas, los más jóvenes disfrutan cada jornada del mar. Allí es justamente donde se encuentran los balnearios más buscados y, desde temprano, las sombrillas y reposeras de todos los colores comienzan a vestir la arena. Quienes eligen pasar los días en esta zona deben saber que tendrán que contar con un plus en sus bolsillos, puesto que cada balneario cuenta con carpas que se pueden alquilar por $ 220 el día por familia o grupo.
Las alternativas en este aspectos también son variadas. Algunos de estos sectores cuentan con pileta climatizada y gimnasio, además de diferentes servicios incluidos en la tarifa, como reposeras, mesas, sillas, duchas y lockers. Mientras que las cocheras se abonan aparte y cuestan alrededor de $ 90 diarios. En algunos casos, los hoteles y hospedajes de la zona cuentan con convenios para permitir que sus pasajeros accedan a precios más bajos al momento de utilizar estos servicios.
