¿Puede alguien no gustarle comer este rico plato? ¡Imposible! Tiene todo: es rico, fácil de preparar y permite un sinfín de alternativas. Vamos a conocer un poco sobre esta preparación tradicional.
El consumo de pan está sumamente ligado con la historia de la pizza. En el antiguo Egipto, una vez descubierta la levadura, comenzaron a preparar panes con la forma del sol. Sus ingredientes principales eran: harina, agua y miel. Fue en Grecia donde le añadieron grasa, especias, ajo y cebolla.
La revolución de la pizza llegó con el arribo del tomate a Europa desde América. Siendo en Nápoles en el siglo XVI cuando se empezó a consumir los tomates como alimento mientras que en el resto de Europa no se consumieron hasta el siglo XVIII. Con el tiempo se fue incorporando al preparado con resultados riquísimos.
Pero, en esta ocasión, te vamos a contar cómo preparar una rica pizza de rúcula. Lo deliciosa de esta opción es que estas hojas verdes se presentan como un colchón esparcido sobre la masa, bañado con aceite de oliva, aceitunas picadas o pasas de uva. ¡Lo que más te guste, puede estar sobre la masa!
Vamos al paso a paso
Ingredientes (6 pizzas)
- 1 kilo
- 1
- 1/2 cucharada
- 3 cucharadas
- 1 cucharadas
- Cantidad necesaria
Relleno
- 1 atado
- 1
- 200 gr.
- Salsa para pizza
Paso a paso
- Colocá la harina y un poco de sal en un recipiente profundo.
- En otro bol, volcar un poquito de agua tibia diluir la levadura con azúcar y dejar fermentar. Lo hace rápido ¡prestá atención!
- Mezclá todo. Agregá el aceite y el agua que necesités.
- Luego, tomá la masa y estirá en un molde con aceite. Mientras más fina, mejor.
- Añadí la salsa y ¡al horno!
- Retirá, y colocá por encima mozzarella, la cantidad que prefieras.
- Lavá bien la rúcula y colocala como un colchón por encima de la preparación anterior.
- Agregá sal y jugo de limón, aceitunas picadas y queso roquefort.
¡Decilioso!