La casa de Trinidad Álvarez, que ocupó el general José de San Martín, desapareció con el terremoto de 1861 y la edificación que se levantó después fue derribada por el sismo de 1985.
Luego se construyó una nueva vivienda de tres niveles y en la parte de atrás se levantó un galpón, en el que funcionaba un taller mecánico. En el marco de una política de rescate de sitios históricos de la Ciudad, el fallecido intendente Víctor Fayad inició negociaciones con los dueños para comprarles la propiedad.
Como el proceso se dilató, optó por enviar al Concejo Deliberante un proyecto de ordenanza para que se declarara de interés público municipal al solar sanmartiniano y poder, de esta manera, expropiarlo.
Pero la normativa, que se aprobó en 2012, no resultó suficiente porque el terreno ya era monumento histórico nacional (desde 1975) y se necesitaba una ley provincial. En 2013, los legisladores aprobaron que se declarara de utilidad pública y sujeto a expropiación el local comercial y la vivienda.
El año pasado, la comuna capitalina procedió a la expropiación y también creó una Comisión Sanmartiniana, integrada por diversos especialistas, quienes hicieron la investigación inicial.
El secretario de Cultura de Capital, Guillermo Romero, explicó que este mes volverán a convocar a los expertos para que entre todos decidan qué se va a hacer en el lugar, aunque lo más probable es que se trate de un museo de sitio -ya que no se conservan objetos de la época- y espacio de interpretación.
Y la directora de Cultura, Martha Artaza, agregó que han pensado utilizar la vivienda existente y aprovechar la vidriera del local comercial de planta baja.
Por lo pronto, adelantó, es muy probable que se traslade a este punto la escultura de San Martín y Merceditas que se encuentra en la Alameda y es objeto de continuos daños. También tienen planeado presentar en agosto un libro con los hallazgos de la Comisión Sanmartiniana.
