Pidieron prisión perpetua para "El Gato” Araya

Prisión perpetua podría recibir hoy Marcelo "El Gato" Araya (36), un presunto narcotraficante que saltó a las crónicas policiales como el mayor enemigo de Daniel "El Rengo" Aguilera, ex líder de la barra de Godoy Cruz.

Ayer, durante el juicio que se le sigue por el homicidio de  Exequiel Salas (32), un presunto integrante de su propia banda, los fiscales Javier Pascua y Claudia Ríos pidieron, durante los alegatos, la pena máxima. La misma suerte corrió Héctor "El Hueso" Morales (33). Araya sería el ideólogo del crimen; Morales, el ejecutor.

Por su parte, el defensor de Araya, Alejandro Acosta solicitó a los jueces de la Quinta Cámara la absolución de Araya; el mismo pedido hizo el abogado de Morales, Enoc Ortiz.

El tema central de los alegatos fueron las escuchas telefónicas, prueba clave no sólo del homicidio de Salas sino también del llamado doble crimen de El Carrizal. Ambos casos son un desprendimiento de una investigación por narcotráfico que realizó la Policía de Mendoza para la Justicia Federal.

Ayer, luego de que Ríos realizara un recorrido sobre todos los testigos que pasaron por la sala de debate, el fiscal Pascua se refirió a las intervenciones telefónicas, a las que consideró pruebas "contundentes".

Tras observar que no hubo escuchas "a la pesca", explicó que la investigación se inició con una nota que surgió de una denuncia anónima y de tareas de campo, y por lo tanto "se hicieron legalmente", pues fueron ordenadas por el juez Walter Bento.

"La defensa no tiene razón. Acá no se dijo tal o cual cosa, se escuchó la prueba (los audios de las escuchas) con garantías, con total transparencia", indicó el fiscal apuntando a los pedidos de los defensores para que se "bajaran" del debate las famosas intervenciones telefónicas.

Luego de asegurar que los policías que hicieron las escuchas "eran creíbles", pasó directamente al contenido de los audios, asegurando que Araya fue el ideólogo de la muerte de Salas y Morales, el brazo ejecutor

"Se ajustició a un soldado vaya a saber por qué. Araya fue el organizador y El Hueso el autor material de los disparos", advirtió el fiscal.

Por último volvió a referirse a las escuchas que la fiscal Ríos ya había mencionado. En las mismas se escucharía a El Hueso hablar con uno de los Mellizos Morales, quien le indicaba por dónde se desplazaba el Falcon que conducía la víctima.

Una escucha posterior da cuenta de una presunta conversación entre Araya y Morales. Allí Morales le da "una buena noticia: le pegué al Exequiel". Después pasa a detallarle cómo le disparó tres veces, entre otros detalles.

Argumentos de la defensa

Los argumentos de los defensores se basaron en la insuficiencia de las pruebas presentadas por la fiscalía. "Existen contrariedades entre lo que se presume por las escuchas y lo que dijeron algunos testigos de la realidad de cómo ocurrieron los hechos", explicó ayer Acosta.

Los defensores desacreditaron las escuchas y agregaron que en las mismas tampoco se pudo probar la identidad de la víctima. "Se menciona a un Exequiel, pero no con apellido. Además se dice que es de un barrio donde la víctima no vivía", continuó el defensor. "El reconocimiento de voz es débil y no fue hecho por una pericia", destacó Acosta.

Por su parte, Ortiz agregó durante su alegato que su defendido al momento del crimen estaba con cuatro personas que testificaron durante el juicio.

Los defensores pidieron la absolución lisa y llanamente, al menos por el beneficio de la duda.