Los directores de 19 agencias nacionales antidopaje, entre ellos potencias deportivas como Estados Unidos, Alemania, Francia y Japón, pidieron ayer en una reunión en Dublín que se prohíba la participación de Rusia en cualquier competición internacional, incluyendo el Mundial de fútbol Rusia 2018.
La prohibición sería indefinida, hasta que Moscú limpie su sistema de dopaje denunciado por informes de la Agencia Mundial Anti Dopaje y Federación Internacional de Atletismo. No afectaría a los atletas que quieran competir de forma neutral –sin bandera rusa- y que pasen por controles de dopaje internaciones.