Mientras la indicación de los profesionales del Hospital Humberto Notti sigue siendo que “hay que esperar”, los papás de Guadalupe Codes (9) decidieron tomar nuevas acciones.
Crearon una petición en Change.org para “Que le quiten la matrícula a los médicos por mala praxis”, en referencia a las dos doctoras que atendieron a la pequeña en el Hospital Español. Esto, ya que tomaron conocimiento de que siguen trabajando en este lugar como también en otros centros asistenciales de la provincia.
En el transcurso de 8 horas, este pedido que presentó la mamá para que sea remitido a la Justicia y al ministro de Salud de Mendoza, Oscar Renna, superó las mil firmas de apoyo.
Andrea Ramírez manifiesta que la equivocación de la doctora “le ha ocasionado a mi hija una cuadriplejia, por lo que está internada en terapia intensiva, conectada a un respirador y luchando por su vida. Es inadmisible esto que le han hecho a mi hija y la doctora lo único que me dijo fue que ‘un error lo comete cualquiera’”.
Más allá de esta campaña, la denuncia por mala praxis avanza en la Justicia. Mauricio Codes, el papá, fue citado ayer a la Unidad Fiscal de Godoy Cruz para declarar, ya que tanto él como la mamá estaban en el consultorio el lunes pasado, cuando le iniciaron un nuevo tratamiento de quimioterapia a la niña.
A Guadalupe le diagnosticaron leucemia a fines de 2012, recibió medicación por seis meses y siguió con controles hasta que el mes pasado encontraron que la enfermedad había vuelto a aparecer.
El hombre comentó a Los Andes que repitió ante el fiscal lo que hasta ahora han informado: que una médica le inyectó a Guadalupe la vincristina (una droga de alta toxicidad) en la médula ósea en lugar de por vía intravenosa. Que al notar esto, otra médica, la segunda denunciada, detuvo el procedimiento -motivo por el que no alcanzaron a colocarle la totalidad de la dosis- y ordenó el traslado de la pequeña al quirófano para drenar la médula.
Pese a eso, Guadalupe comenzó a presentar síntomas de una parálisis que fue ascendiendo hasta llegar a la tráquea y que provocó que terminara en un coma inducido, con respirador, una sonda nasogástrica por la que recibe alimentación y suero con corticoides para intentar revertir el efecto de la droga. El sábado a la mañana fue trasladada del Español al Notti, donde permanece en terapia intensiva.
El último parte médico, en la mañana de ayer, indicó que “la niña continúa con asistencia respiratoria mecánica, se encuentra bajo sedación para su adaptación al respirador, está compensada hemodinámicamente, afebril y permanece estable de su cuadro neurológico”. La única modificación en el cuadro desde el sábado es que desapareció la febrícula que había presentado.
El abogado Guillermo Gorelik, quien es amigo de la familia y presentó el viernes la denuncia por mala praxis en la Oficina Fiscal número 3, detalló que ayer concurrieron integrantes del Cuerpo Médico Forense a constatar el estado de salud de la pequeña. Sin embargo, no pudo acceder al reporte porque la causa se encuentra bajo secreto de sumario.
El fiscal Horacio Cadile, de la Unidad Fiscal de Godoy Cruz (quien recibió ayer el expediente), confirmó que había tomado declaración testimonial a Mauricio Codes y que reiteró lo que se ha difundido hasta ahora, con algunas precisiones que no puede dar a conocer por el secreto. Por el mismo motivo, tampoco pudo ofrecer detalles de lo constatado por el Cuerpo Médico Forense. Y planteó que seguirá recabando testimonios hasta que pueda decidir si corresponde o no la imputación.
“Lo que queremos es que estas dos doctoras no trabajen más, que les saquen la matrícula. Pero también que las suspendan del Español y del Fleming, donde nos hemos enterado que también están”, fue el pedido del papá de Guadalupe, minutos después de regresar de la Fiscalía y con la frustración de saber que sólo les queda esperar la evolución de la niña.
