La inauguración reciente, del supermercado de productores ubicado en la Terminal de Ómnibus, iniciativa impulsada por el Gobierno provincial para acercar a los productores a los consumidores, ya despierta la lectura crítica de los mayoristas.
Controlar el cumplimiento en el pago de los impuestos y realizar todos los controles bromatológicos y de higiene en los alimentos fueron aspectos que puntearon a la hora de un correcto funcionamiento de la nueva superficie comercial.
“Este tipo de iniciativa es válida pero debe respetar que las condiciones tributarias se cumplan de la misma forma que rige para nosotros cuando a diario debemos pagar el 5% en ingresos brutos, el 21% del Impuesto al Valor Agregado.
También tenemos los controles de la municipalidad y el pago al día en el sueldo de nuestros colaboradores así como también los servicios de luz, gas, agua y teléfono”, subrayó Rubén David, de Oscar David Mayorista.
En la visión del empresario la inquietud de direccionar el poder de compra hacia los productores y beneficiarlos en la transacción comercial al consumidor, es positiva, pero sólo se cumpliría en algunos productos.
En general el diferencial de precios tanto en frutas y verduras, según David se puede dar a favor del productor y también del consumidor accediendo a precios más bajos. Sin embargo descree que el diferencial de precios se logre en los productos de almacén.
“Hay alimentos como el azúcar, harina, aceite, los que deben comprar y vender antes de llegar al consumidor, los que no pueden tener una gran diferencia con respecto a supermercados”, deslizó David.
En el caso de Luis Vidal, quien es mayorista en la Feria de Guaymallén, también argumentó sobre la propuesta del gobierno provincial señalando que los negocios allí instalados deben cumplir con todos los controles bromatológicos y de higiene, especialmente en el caso de frutas y verduras.
“En todas las ferias hay inspecciones muy rigurosas que cubren desde los plaguicidas e insecticidas que se usaron en el cultivo hasta todas las tareas posteriores al empaque.
No basta que el productor coloque su producción en cajones y la venda ya que puede desencadenar que la gente se intoxique. Esto es especialmente peligroso para los niños y ancianos ya que poseen las defensas más bajas”, puntualizó Vidal.
Desde su óptica, la instalación de un espacio propio que nuclee toda la oferta regional de alimentos frescos como de almacén comercializados a precios bajos, es bienvenida en tanto se respeten los controles rigurosos y los procesos de lavado, lustrado y encerado para la producción del campo.
La defensa de la canasta de verduras y frutas regionales fue bien calificada por el mayorista Francisco Carrillo.
“El productor puede tener una mayor ganancia en la venta. Hoy ocurren situaciones complicadas como el damasco, cuando el precio para industria es de $ 0,30 el kilo.
Este valor no les permite tener ningún margen de rentabilidad. Sin embargo, si en estas superficies logran venderlo a $ 2 el kilo, el margen de ganancia es más atractivo para ellos, en tanto el consumidor sale beneficiado porque lo compra más barato que los $ 5 que sale el kilo en las verdulerías”, analizó Carrillo.
¿Competencia o cooperación?
Para los mayoristas la llegada del Supermercado de Productores es percibida de diferentes formas.
Los hay como Alberto Buj y Carrillo quienes han sido llamados por representantes del Gobierno provincial para sumarse a la propuesta de vender productos de almacén y frescos en el Supermercado de Productores.
“El supermercado funciona a metros de mi negocio y está estratégicamente muy bien ubicado porque la gente que se moviliza en micro posee en general recursos más bajos, por lo que esta iniciativa ubicada en pleno corazón de la Terminal posibilita llegar a esos consumidores a precios más baratos”, puntualizó Buj.
En otros casos, como el mayorista Olivárez, apuntó que el Supermercado de Productores, es una competencia directa hacia su negocio, ya que el modelo del gobierno provincial busca los precios más bajos y elimina a su mínima expresión todo tipo de intermediarios en la cadena comercial para así favorecer al consumidor y productor.
“Ése es un objetivo que tenemos también nosotros, por lo que el cliente tendrá más opciones y puede optar por esa opción”, subrayaron desde Olivárez.
En cambio para David, el Supermercados de Productores impondrá a los mayoristas revisiones más seguidas sobre el perfil de los precios de venta.
"Nos exige ser competitivos por lo cual lo veo bien. En mi caso como la mayoría de mis colegas, peleamos los precios más bajos con los industriales y proveedores.
Es buena esta iniciativa porque establece condiciones más competitivas para todos”, señaló David. Sin embargo también indicó que esta iniciativa del Gobierno provincial no debe subestimar al consumidor ya que no es necesario guiarlo en sus compras. “Todos compramos en los lugares donde tenemos los precios más bajos y muy buena atención”, expresó David.
La otra faceta positiva que rescató el empresario es que el Supermercado de Productores, que promete en un futuro replicarse en el sur provincial así como también el Valle de Uco y el Este, posibilitará que muchos productores dejen la venta callejera o en rutas evitando condiciones insanas de sanidad.
“Este modelo elimina riesgos potenciales de cólera. Es positivo que estén todos en un mismo lugar y que paguen sus impuestos y costos como hacemos nosotros todos los días”, concluyó David.
Una inversión de 7.500.000 pesos
Con 700 metros cuadrados en plena Terminal de Ómnibus, el Supermercado de Productores de Mendoza ofrece carnes, pescados, frutas y verduras, panificados, lácteos, pastas, artículos de limpieza, vinos, aceites, fiambres, conservas, frutos secos, especias, aromáticas y granos. Los Andes publicó en su edición de ayer que tenía buenos precios pero poca variedad.
La iniciativa elimina los intermediarios con la premisa de abaratar los precios del consumidor final. Según cálculos del Gobierno, por el lugar transitan más de 40 mil personas por día. La obra de refuncionalización del ala oeste del primer piso demandó una inversión de $ 7,5 millones al Estado provincial.