Cuando Juan Pedro Lanzani tenía 15 años, allá por 2005, sus amigos del colegio lo miraron incrédulos cuando les contó que había audicionado para una tira de televisión de Cris Morena. Uno incluso le preguntó: "¿Es una broma?". Peter hablaba de la comedia sub 15 "Chiquititas sin fin" transmitida por Telefé en 2006.
Algo de mueca también tuvo la reacción de sus padres cuando también se enteraron de esta noticia -él, abogado y escribano, ella economista-. Pero su mamá lo acompañó al casting y Peter se puso a esperar "aquel llamado". "Si tenés ganas de perder todo un día en la fila de una vereda, no hay problema", le dijo. Y así lo hicieron.
"Jugaba al rugby. Iba a un cole con doble escolaridad y hacía pequeños roles en esas comedias de cierre de año. Tenía ganas de actuar. Era mi vocación. Estaba decidido. Durante aquella espera, les fui contando en el recreo uno por uno a mis amigos íntimos. Y el teléfono sonó...", se acordó Lanzani, que ahora, una década después, con casi 25 años, le toca debutar bien a lo grande en el cine.
"Toda mi familia me acompañó desde el comienzo, apoyó mis elecciones y me aconsejaron siempre bien. Es un pilar enorme que te apoye en la carrera", se sinceró.
Esa misma familia lo acompañó el martes al exclusivo avant premier de "El clan" en Capital Federal, el más sociable de los que ya se venían haciendo en varias salas del país y en el que también estuvo su novia, Tini "Violeta" Stoessel.
Pero este año no sólo de thriller se está nutriendo el ex "Casi Ángeles", ya que desde el 30 de julio Peter interpreta otro personaje complejo: Alan Strang, el perturbador amante de los equinos de la obra de teatro de Peter Shaffer (que fue llevada al cine por Sidney Lumet en 1977) y que pone al galán y al actor amalgamados simbióticamente en un mismo escenario, ya que al enmarañado laberinto mental de Strang, a Peter le toca desnudarse en una escena, tal como lo hizo en 1977 Miguel Ángel Solá y en 2007 Daniel Radcliffe.
Dirigida por el cineasta Carlos Sorín, "Equus" está producida por el mismo Lanzani y co protagonizada por Rafael Ferro y no para de recibir público de jueves a domingo en una sala off de Chacarita.
Al cine y a las tablas también se suma este año la grabación de la nueva tira que protagonizará Pablo Echarri y Nancy Duplaá "La leona", que Telefé tiene previsto estrenar en setiembre, después de "Historia de un clan", la otra versión serie de la misma historia de los Puccio.
-¿Cómo te sentiste cuando viste el largometraje?
-Aunque uno siempre es crítico de su propio laburo, hay cosas que me gustan. Están logradas. Se cumplieron los objetivos. Pienso que Álex está bien metido en la historia, en las cosas que le tienen que suceder. Además me siento feliz porque fue un laburo de muchísimo tiempo, de mucha energía y haberlo visto terminado le da obviamente un plus diferente. Más siendo mi debut en el cine. Hoy en día estoy disfrutándolo. A la peli la vi en un entorno íntimo y me ha servido mucho para poder hablar de cosas más internas de la película con la prensa.
-¿Cómo llegaste al proyecto?
-Cuando me enteré que Trapero estaba pensando en rodar el caso de la familia Puccio, me puse en contacto con la gente que iba a ser el casting. Audicioné y esperé. Tal como lo hice con "Chiquititas". Cuando leí el libro y la historia de Alejandro quedé fascinado, ya que en esta etapa de mi carrera estoy tratando de encontrar fuertes desafíos actorales, porque sé que te hacen crecer.
-Tomando en cuenta que es un desafío interpretar a un personaje extraído de la vida real. ¿Cómo Pablo Trapero te fue introduciendo en él?
-Pablo me dio un material buenísimo. Él venía desde el 2012 investigando y cuando quedé en el equipo, yo por mi parte fui conociendo a gente que había tratado personalmente a Álex antes del 82 y durante los siguientes secuestros. De esta forma, me fui ubicando en diferentes puntos de vista cronológicos de su perfil social, de su entorno y sus pensamientos internos. Además leí varios libros basados en su psicología. Me acerqué lo que más pude a sus reacciones, a sus decisiones. Después, entre todos los miembros del elenco, unimos las composiciones que cada uno construyó de Arquímedes, Epifanía, Maguila, Silvia, Guillermo y Adriana Puccio, tanto en sus relaciones como clan y como individuos.
-¿En algún momento te sentiste identificado con algo que le sucede a Álex?
-En el momento de tomar decisiones... Claramente no fueron las mismas elecciones que me tocó tomar a mí a su misma edad pero comprendí su lucha interna, su poderosa relación con su padre. Eso de '¿por qué lo hago?', eso de '¿por qué no me voy de acá?' o '¿Por qué me estoy quedando?' Alex toma oscuras resoluciones. Pero, en mi caso, te lo aseguro, no hay nada ni cerca de lo que vivió o hizo Alejandro (risas).
-¿Te gustó hacer cine?
-Si. Me gustó. Me encantaría seguir haciéndolo. De todas maneras, siempre he sido muy cinéfilo. Me gusta mucho Scorsese y Tarantino. Veo mucho cine. Y al haber estado dentro de una película con gigantes como Pablo Trapero y Guillermo Francella fue una experiencia soñada para mí. Me sentí en las Grandes Ligas. Para mí fue muy complejo. Sabía que era una bala que tenía que disparar y que el barril del arma tenía que estar muy bien cargado.
-¿Qué personaje interpretás en "La leona"?
-Soy el hijo de una familia rica que tiene un problema con las drogas. Es otro personaje oscuro. La tira está producida por Árbol - propiedad de Pablo Echarri, Martín Seefeld y Ronnie Amendolara - y aunque no te podría dar ninguna primicia, parece que la tienen ya lista para estrenarla el mes próximo.
Aunque parezca extraño, existe una relación entre las familias Lanzani y Puccio: el padre de Peter era amigo de Mar del Plata de Eduardo Aulet, el segundo secuestrado en 1983.
Es la primera película de Trapero basada en una historia de la vida real.
