El jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, se mostró ayer con el diputado radical Oscar Aguad durante una recorrida por la ciudad cordobesa de Leones, en el marco de declaraciones cruzadas entre dirigentes de la UCR de sumar al Pro a un frente de centroizquierda para las próximas elecciones.
Macri y Aguad coincidieron en la Fiesta Nacional del Trigo, tras las declaraciones del diputado radical a favor de sumar al Pro a un frente nacional de centroizquierda y la negativa del propio presidente de la UCR, Ernesto Sanz, y otros dirigentes de peso. Aunque Macri había dicho antes a una radio: "No vamos a participar de los internismos de los distintos sectores".
Pero mandó un mensaje a esos dirigentes al afirmar que lo que hagan los partidos tradicionales "es su problema" y los fustigó al señalar que los gobiernos, "en estos últimos treinta y pico de años, están llenos de frustraciones".
"Estoy convencido de que hay que sentarse a hablar con Mauricio Macri y con otras fuerzas para establecer si ellos tienen el mismo diagnóstico que nosotros", afirmó Aguad por su parte, y agregó que "discutir la salida de los problemas de la Argentina desde la derecha o la izquierda es una torpeza".
El acercamiento entre el diputado radical y el Pro no es nuevo, y en las elecciones de 2011 los entonces diputados macristas Federico Pinedo y Gabriela Michetti viajaron a Córdoba para respaldar su candidatura.
Pero el senador Gerardo Morales relativizó lo dicho por Aguad y afirmó que el legislador cordobés "siempre ha tenido esa posición y no hay que cortarse las venas por eso, pero yo no la comparto".
Morales dejó en claro que "la inclusión del macrismo no tiene consenso" entre los partidos de centroizquierda con los que dialoga la UCR y ratificó que"hay una decisión mayoritaria (en el radicalismo) de enderezar la construcción con el FAP, la Coalición Cívica y otras fuerzas políticas y no incluir el Pro", confirmó Morales. Y agregó: "Macri está afuera del armado del 2015".
El jefe de Gobierno porteño pareció no inmutarse por esos dichos y a la vez cargó contra los dirigentes que no blanquean sus postulaciones a presidente, al afirmar que "algunos creen que diciendo que no, es mejor para sus candidaturas".
"Yo ya estoy trabajando para ser presidente. Estamos armando el mejor equipo que se haya armado en la historia de los últimos 50 años de la Argentina", sentenció Macri.