Cuando se cumplan los 5 días más de paro anunciados para la semana que viene -algo que ya fue confirmado por los gremios-, la cuenta de días sin clases en los colegios dependientes de la UNCuyo llegará a 21. Se trata de un dato alarmante si se tiene en cuenta que representa a más del 40% de los días que han transcurrido del ciclo lectivo 2016 y más del 10% de los 180 días de clase que año tras año se fijan como meta.
A esto se le suma que -a priori- no se observa un principio de acuerdo salarial entre el Ministerio de Educación y los gremios. No obstante, los padres de los estudiantes han decidido enviar a sus hijos a los establecimientos la próxima semana.
“Como una forma activa de participar, hemos decidido enviar a los chicos a clases y hemos pedido al rector (Daniel Pizzi) garantías. Esto significa que pedimos que haya un mínimo de personal en cada uno de los colegios. La Universidad, por su parte, se ha comprometido a hacer una averiguación del posible nivel de acatamiento”, destacó Federico Vinassa, uno de los padres que durante la mañana de ayer se reunió con Pizzi.
“Las escuelas van a estar abiertas y los padres tienen todo el derecho de mandar a los chicos. Los directores van a estar allí, al igual que los docentes que no hagan paro. Lo que no sé es cuál será el instrumento al que recurrirá el rector para garantizar que los docentes demos clases, ya que no puede interferir en el derecho a huelga de los docentes”, destacó por su parte, la secretaria adjunta de Fadiunc, Francisca Staiti.
Pizzi, en tanto, se mostró optimista al resaltar que el conflicto podría destrabarse la semana que viene, tras dos reuniones fallidas en esta semana.
Preocupados
Durante la mañana de ayer, Pizzi recibió a los padres en el Rectorado. "Vamos a avanzar con dos reuniones, una mañana (por hoy) con los directores de los colegios y otra posterior con directores y padres. La idea es avanzar en la posibilidad de que la semana que viene abramos los colegios dos o tres días con un mínimo de participación de profesores y directores -aunque no sea exactamente regular-, para avanzar y no tener una pérdida importante", indicó el rector, quien resaltó que es fundamental defender tanto los derechos de los profesores como el de los alumnos a tener clases.
Pizzi resaltó los logros de la Universidad en lo que se refiere a sus paritarias propias, a la efectivización de profesores y al avance en la regularización del personal de apoyo académico. “Este es el primer tramo de la paritaria. En el segundo, que busca solucionar y ordenar la problemática económica, hemos hecho mucho esfuerzo pero escapa a nuestra posibilidad. Porque es un tema de Nación, del Ministerio de Educación”, sintetizó Pizzi.
Asimismo, descartó por el momento tomar otras medidas y resaltó que confía en que la negociación salarial se resuelva la semana que viene.
“Tenemos una relación muy buena en términos generales con los gremios y con los padres, y si realmente el conflicto no se resuelve la semana próxima, intentaremos buscar los medios para poder avanzar”, sostuvo.
Staiti, en tanto, indicó que en las dos audiencias de esta semana no hubo avances porque “ofrecieron lo mismo de siempre, repartido de distinta manera”.
En un principio, la Nación ofreció 15% de incremento en mayo y otro 15% para diciembre, aunque esto fue rechazado por los gremios que piden entre 40% (Conadu) y 45% (Conadu histórica). Los sindicatos argumentaron que el segundo aumento ofrecido recién lo cobrarían en enero, por lo que el verdadero incremento para el 2016 sería el de mayo.
“Ahora ofrecieron 15,6% para mayo, y lo de diciembre lo subieron y dividieron en 5% para octubre y 11% mantenido en diciembre, aunque esto último lo cobraríamos en 2017. Entonces, el aumento verdadero ofrecido para este año es de 20,6%, lejos de lo que se pide”, sostuvo la vocera de Fadiunc, quien resaltó que no son muy optimistas. “El rector habla de que podría arreglarse la semana que viene, pero en la mesa de negociación no hay nada concreto. Esto tiene más pinta de imposición por decreto que otra cosa”, destacó Staiti.
Respecto a la llamativa cantidad de días de clases que se han perdido hasta el momento, la gremialista destacó que -a diferencia de 2014 o 2015- este año se han acelerado los tiempos de los paros.
“En el primer cuatrimestre de 2014 hubo más paros de los que ha habido hasta el momento. Y en 2015, que terminó con poco más de 20 días de paros, también tuvimos 7 días sin clases al principio. En ambos casos se hizo adecuación y recuperación de contenidos. Pero hay que entender que esto no es un capricho, sino que es una necesidad de los docentes que vivimos de esto”, sintetizó.
En tanto, Vinassa, en representación de los padres de estudiantes, se refirió a la reunión de ayer. “Estamos preocupados porque nuestros hijos no tienen acceso a la educación por estos días. Y le solicitamos a la UNCuyo que ponga mucha energía en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) y ante el Poder Ejecutivo para acercar las posiciones y así el conflicto llegue a su fin”, destacó el hombre, que tiene una hija que estudia en el DAD.
“Nosotros aspiramos a que los chicos puedan estar en el colegio la semana próxima y que tomen clases con los profesores que van. Lo que no queremos es que esto siga en la misma situación de ahora. Ya van 16 días sin clases y se prevén 5 para la semana que viene. Además, dadas las condiciones en que se da la negociación, no vislumbramos una pronta salida al conflicto, y eso es lo más preocupante”, sostuvo el hombre.
