La nueva conducción del SUTE realizó lo que podría considerarse su primera medida de fuerza contra el gobierno de Cornejo. Aunque hay más de mil escuelas, frente a la Casa de Gobierno se congregaron unos 100 delegados.
Fue una concentración con la modalidad de plenarios extraordinarios departamentales; es decir una asamblea de delegados, los únicos que pueden sortear el descuento del ítem Aula y de los secretariados departamentales.
“La intención es construir una gran acción de protesta para que el gobierno provincial escuche las necesidades de toda la comunidad educativa, comience a dar respuestas y reabra paritarias”, indicaron los agremiados en el sindicato de docentes que comanda Sebastián Henríquez.
La manifestación se basó en tres ejes: elecciones PASO y las condiciones de las escuelas y derechos laborales (en especial de los celadores), privatización en Salud Laboral y la reapertura de paritaria.
Pago extra para limpiar
Con el objetivo de que haya clases con normalidad el lunes, tras las PASO, la DGE confirmó que todos los celadores, tanto de escuelas públicas como de gestión privada, afectados a la desinfección y limpieza posterior a los comicios del domingo, cobrarán un adicional.
El director de Administración, Gabriel Sciola, confirmó que 2.000 celadores están asignados para el domingo.
Sobre los reclamos sindicales aseguró que “garantizamos la seguridad para los celadores, a través del Ministerio de Seguridad”. Rechazó que los celadores tengan un régimen “de esclavitud” como dijo el SUTE. “Es un término retrógrado”, aseguró.
En cuanto a la reapertura de paritarias aseguró que el tema ha sido elevado a las autoridades y “quedamos en dar una respuesta pronto”.