Hay tres frases que el tema “Perro amor explota” de la Bersuit Vergarabat que marcan lo que fue el clásico donde Gutiérrez le ganó al Deportivo Maipú 2-0 con los goles de Chavarría y Juncos y salió del fondo de la tabla.
“Perro caliente no deja nada”. Gutiérrez salió a jugar el partido como tenía que hacerlo. Mordiendo en todos los sectores de la cancha y demostrando que la levantada que viene mostrando en los últimos partidos es seria.
Anuló el escaso circuito de juego de Maipú e hizo hincapié en atacarlo por los costados y así dejó sin nada a un Cruzado que nunca tuvo ideas para atacarlo.
La sorpresa de Sperdutti se incluir a Coria en lugar de Jofré no dio el resultado esperado, ya que nunca hubo conexión entre los de arriba.
"Perro con hambre, perro con bolas". La actitud mostrada por los muchachos de Alejandro Abaurre fue clave para ganar en todos los sectores de la cancha. Y para muestra vale un botón: la forma en la que Matías Chavarría "atacó" la pelota en el primer gol del partido ante pa pasividad del defensor de Maipú.
Ese hambre también se vio en el segundo tanto. Es que después de correr todo el partido, Juncos bancó una pelota dentro del área y definió con una poco ortodoxa chilena para poner el 2-0 definitivo.
Así fue el partido el Celeste. Porque hasta los que se venían destacando por su juego dieron una mano como Franco Olmos, quien no brilló pero se puso el overol y colaboró con un Franco Maldonado que hizo olvidar al lesionado Nicolás Dávila, al igual que la figura del partido Joan Juncos, quien corrió por todo el frente de ataque y además dio una mano para recuperar rápido la pelota.
“Un amor perro no se controla”. Es que la gente de Gutiérrez se fue cantando y más alegre que perro con dos colas. Es que no sólo se sacó la espina del clásico anterior, sino que también ve un resurgir del equipo con los pibes de la casa a la cabeza, potenciados por los refuerzos y los más experimentados del plantel.
Ahora los hinchas saben que se tienen que conseguir más resultados para que este levantada se pueda ver coronada con la chance de meterse en la pelea por el segundo puesto de la zona.
Para el Celeste el partido de ayer fue una canción justa, mientras que para Maipú fue el peor sonido que escuchó.