El Instituto de Inspección General de Seguridad inició una investigación por el caso del periodista mendocino que denunció haber sido agredido por efectivos policiales que lo habían confundido con un narcotraficante cuando se dirigía a un partido.
Franco Coluchi indicó en su cuenta personal de Twitter que el fin de semana pasado iba a cubrir, en su labor periodística, un partido que se disputaba en el estadio Malvinas entre Patronato y Godoy Cruz.
Según contó el periodista, cuando se dirigía hacia el lugar fue interceptado por efectivos policiales que le destrozaron la parte delantera del auto, lo detuvieron y trasladaron a una comisaría de Godoy Cruz.
Luego de seis horas lo soltaron por tratarse de una confusión, ya que el personal estaba tras la pista de un auto similar en modelo y marca al del relator de fútbol.
Ante los hechos denunciados en los medios de comunicación que comprometían al personal policial mendocino, la Inspección General tomó partida en el asunto.
El titular de la Inspección General, Marcelo Puertas, indicó en Canal 7 que abrieron un expediente para iniciar la investigación con el objetivo es determinar la responsabilidad del accionar del personal policial.
“En caso de que exista responsabilidad el expediente se va a transformar en sumario y se abrirán las vías para el derecho a defensa correspondiente”, afirmó.
Asimismo, Puertas señaló que han solicitado información al denunciante, como así también requirieron de las cámaras de seguridad del lugar donde se produjo el hecho y piden la colaboración de testigos que han presenciado los hechos.
“Hemos abierto un expediente para determinar la verisimilitud de los hechos. Vamos a citar a que amplíe la declaración el señor Coluchi, también hemos pedido las cámaras del lugar para determinar la mecánica de los hechos”, manifestó el procedimiento de la investigación.
Además, indicó que pedirán testimonio a otros policías que llegaron luego de que el auto fuera embestido y el periodista detenido. Cabe aclarar, que según relató Coluchi la Policía chocó su auto y luego lo mantuvo esposado seis horas por confundirlo con un narcotraficante.