Los gobernadores en funciones y electo de la provincia trabajan en la redacción de un proyecto de ley que autorice un megaendeudamiento que permita cerrar sin dificultades la gestión del justicialista Francisco Pérez y abrir con mayor tranquilidad la del radical Alfredo Cornejo. Su monto global no ha trascendido pero se supone que oscilará en torno a los 6 mil millones de pesos, aunque ayer no faltaban versiones sobre una cifra todavía mayor.
La iniciativa corre en paralelo con las gestiones que Pérez y Cornejo mantienen con autoridades del Banco Nación, que apuntan a prolongarle la condición de agente financiero de la Provincia a cambio de la atención de esta necesidad de financiamiento, en momentos en los que se espera un segundo encuentro complementario al del lunes pasado.
El tema ha generado posturas diferentes entre un Ejecutivo provincial que propicia la aprobación y legisladores e intendentes del peronismo, muy críticos y remisos a cualquier sanción a mano alzada.
La existencia del borrador fue confirmada por el propio Pérez y todo indica que en él están trabajando los mismos protagonistas de la transición: Francisco García Ibáñez, Félix González, Juan Gantús y Jorge Tanús por un oficialismo que está a 83 días de convertirse en oposición y Martín Kerchner y Enrique Vaquié por una oposición a igual cantidad de días de convertirse en el oficialismo mendocino.
En las últimas 48 horas hubo al menos tres reuniones, incluida una de Pérez y Carlos Ciurca con los intendentes de Maipú, Alejandro Bermejo; de San Martín, Jorge Giménez (ambos del sector Azul) y Emir Félix, de San Rafael, de la Línea Integración. Según trascendió, también estuvieron presentes el presidente de Diputados, Tanús; el titular provisional del Senado, Eduardo Bauzá, y el ministro de Hacienda, Gantús.
Aunque no trascendieron detalles del contenido del borrador, por ahora parece que hay más acuerdo entre Pérez y Cornejo que entre Pérez y su bloque de diputados (ver aparte), desde donde no faltan reparos a aprobar un endeudamiento recortado o negado por el radicalismo antes de las últimas elecciones.
“El primer objetivo es el acuerdo político provincial. Si logramos esto, conseguiremos una ley de financiamiento”, dijo Pérez por Radio Mitre. “Ese acuerdo político nos dará una fortaleza más grande para sentarnos a negociar con el Banco Nación”. Concluyó: “Me parece que el que va a resolver esta tratativa no es el presidente del banco, ya que siempre nos ha sucedido que lo termina definiendo el ministro de Economía (Axel Kicillof), con quien ya se reunió Alfredo Cornejo y hay buena voluntad en una negociación trascendente que marcará en los próximos años la relación Provincia y banco”.
Sin embargo, el Gobernador no ha encontrado los mejores ánimos entre los propios legisladores del Frente para la Victoria. El bloque oficialista mantuvo un encuentro el martes pasado en el que abundaron las críticas a “autorizar al radicalismo lo que nos negó durante tres años” . No faltaron las quejas contra Pérez porque “nunca nos participaron de la transición”.
“Tenemos posturas diversas y estamos intentando adoptar una posición de bloque, pero hay un malestar generalizado que se inclina por aprobar el endeudamiento necesario sólo hasta el 9 de diciembre. De ahí en adelante, que las autorizaciones a endeudarse se voten como parte del proyecto (radical) de Presupuesto 2016 y con la nueva integración de la Legislatura”, remarcó un diputado del FpV.
Tanto con la actual composición como con la nueva, para alcanzar los dos tercios necesarios para la aprobación de un endeudamiento (32 votos sobre 48) serán necesarios los votos de los dos bloques mayoritarios de Cambia Mendoza y del Frente para la Victoria. En la Cámara de Diputados actual hay 21 bancas tanto para el FpV y aliados como para la UCR y aliados. En la próxima, Cambia Mendoza tendrá 25 y el FpV se quedará con 19 legisladores.